No trabajar suele ser más interesante que ganar el salario mínimo, con cifras que lo respaldan

-

En Francia, el debate sobre el bienestar está en pleno apogeo. Un funcionario electo local demuestra que trabajando con el salario mínimo, la ganancia en comparación con la asistencia social es irrisoria.

Trabajar o vivir de la asistencia social, ¿un dilema francés? El tema es delicado y divisivo. Una parte de la población francesa y de la clase política denuncian periódicamente unas ayudantías excesivas que desalentarían la vuelta al empleo. Sin embargo, si se mira más de cerca, la realidad parece más compleja. Esto es lo que Benoît Christian, concejal municipal responsable del empleo en Angers, quiere demostrar de forma muy concreta en una serie de tuits dedicados a este tema.

Basándose en las cifras oficiales de la Drees (Dirección de Investigaciones, Estudios, Evaluación y Estadísticas), el elegido, contable de profesión, compara los ingresos de un hogar sin actividad profesional que se beneficia de la asistencia social con los de un hogar en el que al menos un miembro trabaja, incluso a tiempo parcial. Primera observación: trabajar siempre paga más que vivir únicamente de las ayudas. La diferencia es tanto mayor cuanto que el hogar es pequeño.

Pero es cuando se profundiza más cuando surge el problema. Porque estas cifras no tienen en cuenta los gastos que genera la actividad profesional, a veces elevados: gastos de transporte, cuidado de los niños, pérdida de ciertos derechos y tarifas sociales… Tantas cargas que pesan seriamente sobre la ganancia ligada a la reanudación del empleo.

Benoît Christian toma el ejemplo de una pareja sin hijos. Sin actividad, recibe 1.114 euros de ayuda al mes (RSA, APL, etc.). Si pasa al salario mínimo, sus ingresos aumentan a 1.873 euros, o una ganancia bruta de 759 euros. Pero una vez deducidos los costes relacionados con el coche (estimados en 333 euros al mes) y la pérdida de determinados derechos relacionados (72 euros), la ganancia neta cae a 354 euros al mes. Para obtener esta cantidad, uno de los cónyuges habrá trabajado 133 horas. Se trata de un beneficio real de sólo 2,66 euros por hora, a menudo para un trabajo difícil y poco gratificante. Ahora entendemos que el incentivo es débil…

Y de nuevo, este cálculo no tiene en cuenta una posible “ventaja HLM”, que puede representar hasta un 40% de ahorro en el alquiler respecto a la vivienda privada. Por no hablar del coste prohibitivo del cuidado de los niños, a pesar de las ayudas existentes. Hay tantos elementos que hacen que regresar al empleo sea aún menos atractivo financieramente.

Benoît Christian no se queda ahí y evoca el impacto del trabajo no declarado. ¡Ganar 20 euros por hora no declarada te permite ganar en 2,5 días lo mismo que trabajando legalmente con el salario mínimo durante un mes entero! La tentación es grande, incluso si se produce a expensas de los derechos sociales.

En conclusión, para Benoît Christian, el problema no es tanto el nivel de asistencia social como la baja remuneración del trabajo, en particular en los empleos poco cualificados.

-

PREV Operado por una herida de bala, el primer ministro eslovaco, Robert Fico, se encuentra en “estado crítico” – rts.ch
NEXT Genk es concreto en la creación de su competidor Cercle Brugge, que no es el único lugar donde estar – Voetbalnieuws