El Servicio Meteorológico Nacional ha emitido advertencias de bandera roja por condiciones severas de incendio hasta el miércoles, con vientos sostenidos de 50 mph y ráfagas en las montañas que alcanzan las 70 mph. El día más peligroso será el martes, afirmó el meteorólogo Rich Thompson.
“Habrá ráfagas de viento muy fuertes en Santa Ana, una atmósfera muy seca y matorrales aún muy secos, por lo que todavía tenemos condiciones climáticas muy críticas para los incendios”, dijo Thompson en una reunión comunitaria el sábado por la noche.
El jefe de bomberos del condado de Los Ángeles, Anthony C. Marrone, dijo que habían llegado 70 camiones cisterna adicionales para ayudar a las cuadrillas a combatir las llamas propagadas por nuevas ráfagas. “Estamos preparados para el próximo evento eólico”, subrayó.
Se ha culpado ampliamente a los feroces incendios en Santa Ana de convertir los incendios forestales provocados la semana pasada en infiernos que arrasaron barrios enteros alrededor de la ciudad, donde no ha habido lluvias significativas en más de ocho meses.
Doce personas están desaparecidas en el área del incendio de Eaton y cuatro en el incendio de Palisades, dijo el sheriff del condado de Los Ángeles, Robert Luna. Añadió que podrían haber llegado “docenas” de informes adicionales el domingo por la mañana y que los investigadores se preguntaban si algunos de los desaparecidos podrían estar entre los muertos. No hay niños entre los desaparecidos, afirmó.
Mientras tanto, el número de muertos aumentó a 24 durante el fin de semana. Ocho de las muertes se atribuyeron al incendio Palisades y 16 al incendio Eaton, según la Oficina Forense del Condado de Los Ángeles.
Las autoridades esperan que esa cifra aumente a medida que equipos con perros detectores de cadáveres lleven a cabo búsquedas sistemáticas en los barrios arrasados. Las autoridades han creado un centro donde la gente puede denunciar a los desaparecidos.
También se creó una base de datos en línea para permitir a los residentes evacuados ver si sus hogares resultaron dañados o destruidos. Mientras tanto, la jefa de bomberos de la ciudad de Los Ángeles, Kristin Crowley, instó a los residentes a mantenerse alejados de los vecindarios quemados.
“Todavía hay incendios activos en el área de Palisades, lo que hace que la situación sea extremadamente peligrosa para el público”, recordó Crowley durante una conferencia de prensa el domingo. “No hay electricidad, no hay agua, hay líneas de gas rotas y tenemos estructuras inestables. Los socorristas están trabajando lo más rápido posible para garantizar que sea seguro para ustedes regresar a sus comunidades”.
Las autoridades han advertido que las cenizas pueden contener plomo, arsénico, asbesto y otros materiales nocivos.
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Unas 150.000 personas en el condado de Los Ángeles seguían bajo órdenes de evacuación, y más de 700 residentes se refugiaban en nueve refugios, dijo Robert Luna. Hasta el domingo por la mañana, Cal Fire informó que los incendios de Palisades, Eaton, Kenneth y Hurst habían consumido más de 100 millas cuadradas, un área más grande que San Francisco. El incendio de Palisades estaba contenido en un 11% y el incendio de Eaton estaba contenido en un 27%. Estos dos incendios cubrieron casi 153 kilómetros cuadrados.
Equipos de California y otros nueve estados participan en la respuesta en curso, que incluye 1,354 camiones de bomberos, 84 aviones y más de 14,000 efectivos, incluidos bomberos recién llegados de México.
Detenciones por saqueo
Los saqueos siguen siendo una preocupación y las autoridades informan de más arrestos a medida que la devastación empeora. Michael Lorenz, capitán del Departamento de Policía de Los Ángeles, dijo que siete personas han sido arrestadas en los últimos dos días.
“Incluso arrestamos a dos personas que se hacían pasar por bomberos entrando y saliendo de casas, por lo que estamos prestando mucha, mucha atención a todos”, dijo Lorenz en la reunión comunitaria del sábado por la noche.
Cuando se le preguntó sobre el número exacto de saqueadores arrestados, dijo que no podía dar una cifra precisa, pero que la policía arrestaba a unas 10 personas por día. Tropas de la Guardia Nacional de California llegaron el viernes para ayudar a proteger las propiedades.
El gobernador de California, Gavin Newsom, publicó en X el sábado que “California NO permitirá el saqueo”.
La reconstrucción será un desafío
Gavin Newsom emitió una orden ejecutiva el domingo destinada a acelerar la reconstrucción de propiedades destruidas suspendiendo algunas regulaciones ambientales y garantizando que no aumenten las evaluaciones de impuestos a la propiedad.
“Necesitamos que la gente sepa que los apoyamos”, dijo. “No se vayan porque queremos que regresen y reconstruyan y reconstruyan con mejores estándares de construcción, estándares más modernos. Queremos asegurarnos de que los costos asociados con esto no sean desproporcionadamente altos, especialmente en una comunidad de clase media como ésta”.
La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, señaló el domingo que había hablado con miembros de la administración presidencial entrante y esperaba que Donald Trump visitara la devastada región.
