Primero, algunas buenas noticias: el precio de los diamantes ha bajado entre un 25 y un 30%. ¿Las malas noticias? El precio de un diamante real sigue siendo un poco caro. Un diamante de 1 quilate cuesta como mínimo 2.000 euros (hasta 20.000 euros, según la calidad).
Si se nota una disminución es porque hemos aprendido a fabricar diamantes. Como recordatorio, el verdadero diamante es una piedra extraída de la tierra, en las minas. Entonces una piedra natural. Pero hoy el hombre ya sabe cómo fabricar un diamante en el laboratorio. Materias primas ? Átomos de carbón. La idea es reproducir en laboratorio las condiciones de temperatura y presión en las que se desarrollan los diamantes naturales.
Según quienes los fabrican, son visible y químicamente idénticos a los diamantes. Evidentemente, en principio, no son los “mismos diamantes”. Pero lo cierto es que verdaderos especialistas en diamantes también se han fijado en estos diamantes fabricados en laboratorio.
Es el caso de De Beers, el gigante mundial de las piedras preciosas que se lanzó a la fabricación de diamantes en 2018.. El gigante decidió venderlos a un precio reducido en comparación con el diamante real, con la esperanza de preservar el prestigio del diamante real. Problema: ¡tuvo el efecto contrario! Los diamantes cultivados en laboratorio son mucho, mucho más baratos. Tanto es así que resulta muy difícil vender diamantes reales..
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