Publicado el 1 de noviembre de 2024 a las 17:50 horas.
Mientras asistía al juicio contra el conductor que mató a su hijo Antoine, Yannick Alléno dio un testimonio conmovedor el día de la tragedia.
El 8 de mayo de 2022, Yannick Alléno perdió a su hijo Antoine. El joven fue atropellado por un hombre que conducía un coche robado, en estado de ebriedad y sin licencia. El juicio del conductor se abrió este jueves 31 de octubre en París. Acusado de homicidio involuntario con al menos dos circunstancias agravantes, lesión involuntaria y robo con violencia, se enfrenta a diez años de prisión y una multa de 150.000 euros. Mientras estaba presente, Yannick Alléno dio un conmovedor testimonio sobre la tragedia: “Aquella tarde regresé de un viaje. Desde ese día me digo que nunca debería haber estado aquí, Antoine debería estar en su restaurante. Me encuentro ante lo inaceptable, lo intolerable”, confiesa en el bar, según informa a X Noémie Shulz, reportera policial y judicial de “FranceTv”.
Mientras llegaba rápidamente, el jefe se enfrentó a una tragedia: “Tenía un mensaje de mi otro hijo, fui allí y vi una escena de caos”, explicó. Y continúa: “Mi hijo debajo de una manta, reconocí sus calcetines a rayas. También vi estos litros de su sangre en el suelo. […] Era como la escena de un ataque. Me acosté sobre mi hijo y grité”. Yannick Alléno dice haber “visto lo peor”, “su hijo detrás de un cristal en el instituto forense”. “No hay palabras cuando pierdes a tu hijo o a tu hija”, lamentó. El dirigente recordó luego que en 2023, algo más de 600 jóvenes “a menudo se fueron en estas circunstancias cerca de Antoine”.
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“Llegué, vi una sábana blanca”
Durante la audiencia, también habló la madre de Antoine Alléno, que intenta “aguantar”. Así, habló de una “lucha cada mañana por levantarse, porque lo perdió todo el 8 de mayo”. “Fue un terremoto, una catástrofe. Siempre tememos por nuestros hijos, pero nunca imaginamos lo peor”, afirmó. Y para concluir: “Llegué, vi una sábana blanca, escuché los gritos de Yannick que gritaba. Hoy todavía me pregunto si no voy a despertar, si no fue una pesadilla. Lamentablemente esta es la realidad”.
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