Donald Trump está siendo juzgado penalmente desde el lunes 15 de abril por el caso de los sobornos pagados a la ex estrella porno Stormy Daniels. Se sospecha que quiso comprar su silencio.
“Un ataque a Estados Unidos”. Donald Trump, juzgado desde este lunes 15 de abril durante un juicio penal sin precedentes contra un expresidente estadounidense, habló antes de entrar a la sala del tribunal. El empresario afirma ser víctima de una “persecución política, una persecución sin precedentes”. “Nadie ha visto nunca algo así”, dijo a una multitud de periodistas y simpatizantes. “Todos los juristas dicen que este caso es absurdo. Nunca debería haberse presentado. No hay caso”, afirmó el candidato republicano.
Donald Trump se enfrenta a los tribunales por pagos supuestamente realizados para comprar el silencio de la ex estrella porno Stormy Daniels. Pagos que se produjeron tras la victoria del multimillonario estadounidense en las elecciones presidenciales de 2016. “Es un ataque a Estados Unidos y por eso estoy muy orgulloso de estar aquí. Es un ataque a nuestro país. “Es un país que está fracasando”. dijo el expresidente estadounidense, señalando el historial del actual jefe de Estado Joe Biden. Un “incompetente muy implicado” en este caso judicial, según él. “En realidad es un ataque a un oponente político, eso es todo. Así que me siento muy honrado de estar aquí”, afirmó.
¿Pagos ocultos?
Comunicación que se extiende a las redes sociales donde se transmitió un video digno de una película de Hollywood. “Quieren quitarme la libertad porque nunca dejaré que te quiten la tuya, es muy simple. Quieren silenciarme, porque nunca dejaré que te silencien a ti”, explica en este clip elaborado por su equipo de comunicación.
El multimillonario republicano está acusado de 34 falsificaciones de documentos contables de su empresa, la Organización Trump. Hechos que habrían permitido ocultar, bajo el pretexto de “costas judiciales”, pagos de 130.000 dólares a Stormy Daniels. La ex estrella del porno había aceptado a cambio mantener en secreto una relación sexual con el candidato, que había ocurrido diez años antes. El principal interesado siempre ha negado esta relación. Si bien debe enfrentarse a Joe Biden en noviembre para vengarse de las anteriores elecciones presidenciales, Donald Trump corre el riesgo de una pena de prisión que no le impediría llevar a cabo su campaña para reconquistar la Casa Blanca.
