A Hervé López siempre le ha gustado el contacto humano y ayudar a los demás. Sin embargo, su carrera educativa y profesional le llevó a Airbus en Toulouse, donde ejerció su carrera como mecánico durante 28 años. Luego estaba el Covid. Hervé se toma el tiempo para calmarse, hace balance de su situación profesional y decide reciclarse. Siente una gran energía, magnetismo dentro de él. Por ello decidió formarse y convertirse en terapeuta energético, actividad que practica desde hace 2 años. La principal misión del terapeuta energético es aliviar a su paciente mediante transmisiones energéticas mediante la práctica de la litoterapia, el magnetismo o los masajes energéticos. La terapia energética está dirigida a cualquier persona que sufra dolores de espalda, dolores musculares, estrés o ansiedad. Les ayudará a afrontar el dolor o los efectos secundarios de un tratamiento médico intenso. El objetivo es aportar bienestar, relajación o relajación. Así, la energética reúne un amplio medio terapéutico que se basa en el conocimiento de los cuerpos energéticos combinado con remedios naturales.
Las sesiones se desarrollan de forma presencial, pero también a distancia.