“Pero la industria de la IA necesita un gobierno que la apoye, que no se quede de brazos cruzados y que no deje escapar oportunidades”, defendió el líder laborista en este comunicado.
Este plan, que el primer ministro presentará en un discurso el lunes, debería permitir “atraer empresas de inteligencia artificial, nuevas inversiones y crear nuevos puestos de trabajo al Reino Unido”, afirmó la ministra de Finanzas, Rachel Reeves.
El gobierno también se ha comprometido a aumentar 20 veces la capacidad informática del Reino Unido para 2030, incluida la creación de una nueva “supercomputadora”.
El primer ministro Keir Starmer, que llegó al poder en julio, ha hecho de la reactivación de la economía la prioridad de su mandato.
Pero está luchando por cumplir sus promesas con un crecimiento lento, costos de endeudamiento crecientes y una libra esterlina en caída, lo que podría llevar a mayores aumentos de impuestos o recortes presupuestarios.