Destaca por su fuerte religiosidad y por ser la única mujer de los ocho acusados. Priscilla Mangel, de 36 años, aparece en la sección “jihadosfera” del juicio por el asesinato de Samuel Paty. Se le acusa de haber, a través de intercambios en Twitter tras la difusión del vídeo del padre de la colegiala el 8 de octubre de 2020, “reforzado la determinación de Abdoullakh Anzorov de actuar”. (contra el maestro) dándole argumentos ideológicos”. Lo cual ella niega. “No lo consolé. Mi única implicación es haber participado en la polémica (…) Tengo una creencia que puede parecer rigurosa pero no hay ideología en ella”, se defendió este miércoles ante el Tribunal extraordinario de París.
Túnica verde sobre pantalones, el rostro de Priscilla Mangel está rodeado por un largo pañuelo marrón donde resalta unos enormes ojos claros. Al presidente, que la interroga sobre su compromiso religioso, le cuenta su conversión al Islam cuando era adolescente. Su curiosidad la despertaron los libros prestados por su padre. Su creciente interés por una religión que da “reglas de vida, un marco preciso y seguro” y donde “el lugar de la mujer la atrae” – en una visión patriarcal donde “el marido protege a su mujer”.
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