“Vendían autos que no les pertenecían”

“Vendían autos que no les pertenecían”
“Vendían autos que no les pertenecían”
-

“Ahora mismo estoy a pie”. Cuando en mayo pasado decidió darse un capricho comprando un modelo premium en Luxemburgo, Sarah* probablemente no imaginaba ver su coche atrapado en el garaje. Pero después de meses de espera y dilación, la joven decidió presentar una denuncia en noviembre contra la empresa Car Store, vendedora de automóviles con sede en Contern.

En quiebra desde finales de diciembre, la empresa es acusada por al menos diez clientes de haber vendido vehículos que no le pertenecían durante el año pasado. Según nuestra información, estos procedían originalmente de una empresa de leasing. Entonces, con grandes dificultades, Car Store no habría abonado las cantidades que permitían la adquisición de dichos vehículos tras el alquiler. En su derecho, la empresa de alquiler habría declarado robados determinados coches. Una consecuencia que coloca a los clientes de buena fe en una situación aún más complicada.

“Nos vendieron autos que no les pertenecían. El riesgo es que nos los quiten. Pero de todos modos no podemos utilizarlo”, explica Sarah. Al no poder finalizar la compra de los vehículos en cuestión, Car Store nunca proporcionó los documentos que permitían su matriculación. Habiendo caducado el uso de la placa temporal, el vendedor habría multiplicado los subterfugios, llegando incluso a ofrecer alquiler de coches de sustitución a los interesados, a través de su entidad Rent Me.

“El objetivo era ahorrar tiempo”, explica Sarah, que se comunica periódicamente con una decena de clientes más en su misma situación. Se han presentado denuncias en Francia y recientemente en Luxemburgo, lo que se confirma Lo esencial el parquet. “Actualmente se encuentra en curso una averiguación previa”, nos dijo la autoridad judicial. Las presuntas víctimas se han organizado, nueve de ellas están representadas por Brian Hellinckx, abogado del tribunal. “Este asunto podría describirse como una estafa”, resume Lo esencial.

A pesar de varios intentos, no se pudo contactar con los ex ejecutivos de Car Store. “Por nuestra parte tampoco, no más sonidos, no más imágenes”, lamenta Sarah, que inevitablemente se arrepiente de haber gastado 36.700 euros en su coche: “Son sumas importantes. Algunas personas compraron algunos modelos geniales. ¡Incluso hay un Lamborghini!

*El nombre ha sido cambiado.

-

PREV Las empresas suizas han invertido 18 mil millones en investigación
NEXT Tras el fracaso de la aplicación Sonos, el jefe Patrick Spence hace las maletas pero recibe un gran cheque