Esta medida, tomada en vista de los abusos y las tensiones de suministro observadas, tiene como objetivo garantizar el uso adecuado de estos medicamentos y la eficiencia del gasto sanitario relacionado con ellos. Supedita el tratamiento de Ozempic (semaglutida), Victoza (liraglutida), Trulicity (dulaglutida) y Byetta (exenatida), cuya comercialización en Francia se interrumpió a finales de 2024, a la prestación, por parte del prescriptor, de determinados elementos relativos a las indicaciones y circunstancias de la prescripción. El cuestionario incluye tres ítems relacionados con la edad del paciente, la presencia de diabetes tipo 2 y la coadministración de otros tratamientos antidiabéticos o la existencia de contraindicación para tomar metformina.
En principio, el médico utiliza el teleservicio específico para cumplimentar este documento, que en cualquier caso debe presentarse al farmacéutico para tener derecho al reembolso de la receta. Este documento también deberá ser remitido al servicio de control médico del seguro de salud por el prescriptor, farmacéutico o cualquier otro profesional sanitario. “El incumplimiento de estas obligaciones podrá dar lugar a la constatación de un pago excesivo correspondiente a las sumas cubiertas por el seguro de enfermedad”, precisa el artículo L162-19-1 del Código de la Seguridad Social.
La medida entra en vigor a partir de 1es febrero 2025.
Salud