Es una de las drogas más mortales. El fentanilo, este opioide 40 veces más potente que la heroína y 100 veces más potente que la morfina, es responsable de la muerte de 290 personas al día en Estados Unidos. Entró en el continente europeo.
Cifras alarmantes
Comúnmente llamada la droga zombie porque bajo su influencia, sus usuarios literalmente se retraen en sí mismos, terminando pareciéndose a los muertos vivientes de las películas de terror. Extremadamente adictivo, su tasa de mortalidad por sobredosis aumentó un 279% entre 2016 y 2021 en los Estados Unidos y solo se necesitan 0,2 gramos de fentanilo para provocar una sobredosis.
En una entrevista televisiva del 24 de marzo, Alfredo Mantovano, subsecretario de la Presidencia del Consejo italiano, advirtió:
“Está en marcha una pandemia. En Estados Unidos, 106.000 personas murieron a causa de ella en 2022, frente a las 86.000 del año anterior y las 60.000 de 2020. No debemos dejarnos coger por sorpresa, porque ante una pandemia no hay fronteras”.
“El fentanilo es un problema que ha alcanzado su punto más alto. Estará sobre la mesa del G7 en junio. Su exposición en dosis muy pequeñas es tan peligroso que incluso los agentes del orden deben tener mucho cuidado”.
Luego invitó a pelear. “en varios frentes: salud, policía e información. El plan lanzado por el gobierno pretende precisamente no ser tomado por sorpresa”.
A partir del minuto 2.20, las imágenes del efecto del Fentanilo muestran a los consumidores “acurrucados” sobre sí mismos.
Usuarios atípicos
Este potente analgésico, utilizado originalmente en el tratamiento del dolor crónico severo de origen oncológico, fue desviado hace unos diez años durante lo que se conoce como la crisis de los opioides responsable de la muerte de 500.000 personas en diez años en Estados Unidos. Está en duda la decisión de las autoridades sanitarias federales de ampliar las prescripciones de analgésicos, haciendo accesibles a todo el mundo medicamentos hasta ahora reservados para pacientes con cáncer o esclerosis múltiple, para los simples dolores repetidos.
Los consumidores de fentanilo son principalmente personas a las que, por motivos de salud, les recetaron el analgésico y se volvieron dependientes del mismo, siendo la sustancia altamente adictiva desde las primeras dosis. Incapaces de liberarse de su adicción, comienzan a abusar de ella ilegalmente: falsificando recetas o robando en farmacias u hospitales, comprando en la Darkweb o mediante el clásico tráfico callejero de drogas.
De hecho, jóvenes atletas lesionados, padres y madres que sufren algún dolor crónico, que nunca habrían sentido la necesidad de drogarse, se han vuelto adictos a las drogas.. En Internet abundan los vídeos de estos estadounidenses “normales” de clase media que mueren de sobredosis mientras juegan en el jardín con sus hijos, mientras hacen compras o van a la oficina de correos.
Mayor vigilancia en Italia
La altísima rentabilidad del tráfico de fentanilo ha generado naturalmente su expansión con fines recreativos: hasta el punto de queél está en el proceso de suplantar la heroína. Por no hablar de que a menudo se vende disfrazada de otra droga o mezclada con otras sustancias, sin que el “cliente” sepa lo que compra, lo que representa un riesgo adicional considerable.
En noviembre de 2023 se produjo una incautación de contrabando de fentanilo en territorio italiano, gracias a una operación policial llevada a cabo conjuntamente con la Agencia Antidrogas estadounidense (DEA). El narcótico, secuestrado en Plaisance, al norte de la península, había llegado desde China y luego enviado por correo al mercado americano.
El 12 de marzo de 2024, El gobierno italiano anunció un “Plan Nacional de Prevención contra el uso indebido de fentanilo y otros opioides sintéticos”. Prevé, entre otras cosas, medidas de prevención y seguimiento (seguimiento de cualquier aumento del consumo de fentanilo “legal”, control de la accesibilidad de las existencias hospitalarias y farmacéuticas, formación del personal sanitario y policial, seguimiento de la llegada de pacientes afectados por sobredosis en urgencias hospitalarias, campañas informativas).
Es el segundo país de Europa, después de Suecia, que actúa en esta dirección.
Audrey D’Aguanno
Crédito de la foto: captura de pantalla en mezz’ora Rai 3.
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