Fin de serie para los Hawks. Durante la noche del domingo al lunes, se inclinaron 111-141 en el campeonato de la NBA. Después de seis éxitos consecutivos, incluidos dos contra los Cavaliers, líderes de la Conferencia Este, y uno contra los Lakers de LeBron James, Atlanta ha encontrado a su maestro: Denver.
En las filas de los Nuggets, Nikola Jokic ha sido insaciable. Autor de 48 puntos, repartiendo 8 asistencias y capturando 14 rebotes, el serbio fue el verdugo de Clint Capela y sus compañeros. El triple MVP no había digerido la derrota de su equipo ante Washington 24 horas antes, a pesar de sus 56 puntos. “En mi país, después de este tipo de período, tu salario será más bajo de lo habitual. Quizás necesitemos eso, un poco de motivación”, dijo.
Los Hawks, que siguen séptimos en la Conferencia Este, pagaron rápidamente el precio de este despertar. Perdían 23-38 al final del primer cuarto y 48-71 en el descanso. Al igual que la estrella Trae Young, limitada a 15 puntos pese a sus 35 minutos en cancha, la franquicia georgiana nunca pesó en este duelo. Por su parte, Capela estuvo alineado durante 19 minutos. A pesar de este tiempo de juego reducido, el ginebrino estuvo cerca del doble doble (9 puntos, 10 RBD).