Estados Unidos vuelve a vivir un drama vinculado a las armas de fuego. El sábado, un individuo disparó al azar en un parque infantil en el estado de Michigan, hiriendo al menos a nueve personas, entre ellas un niño.
El tiroteo tuvo lugar en Rochester Hills, un suburbio de la ciudad de Detroit, según la Oficina del Sheriff del condado de Oakland.
Varias series de disparos.
“El individuo estacionó, bajó de su vehículo, se acercó al patio de juegos, abrió fuego. Recargó, abrió fuego y se fue. A estas alturas, parece un acto aleatorio”, dijo a la prensa el sheriff Michel Bouchard. Según él, el tirador “no tiene ningún vínculo con las víctimas”.
El tiroteo dejó entre nueve y diez heridos, incluido un niño de ocho años, dijo el sheriff. En el lugar se encontró una pistola Glock y varios cargadores vacíos.
El sospechoso está “rodeado”
“Tenemos a un individuo, que creemos sospechoso, rodeado en los alrededores”, añadió Michel Bouchard. Se desplegaron en el lugar equipos de respuesta policial de élite y vehículos blindados.
Con más armas que personas, Estados Unidos tiene la tasa de muertes por armas más alta de todos los países desarrollados. Los tiroteos son un flagelo recurrente que los sucesivos gobiernos hasta ahora no han podido frenar, y muchos estadounidenses siguen muy apegados a sus armas.
