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La ministra francesa para la Transición Ecológica, Agnès Pannier-Runacher, presentó el jueves un plan destinado a proteger los glaciares y a las poblaciones contra los peligros relacionados con su derretimiento.
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21 de noviembre de 2024 – 15.27
(Keystone-ATS) Estas medidas, detalladas durante un viaje a Chamonix-Mont-Blanc (Alta Saboya, sureste), forman parte del Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático (PNACC) que pretende preparar al país para las consecuencias de un aumento de 4°C. en las temperaturas a finales de siglo.
Los macizos de los Alpes y los Pirineos son especialmente vulnerables al calentamiento, con temperaturas que ya han aumentado 2°C en el siglo XX, frente a los +1,4°C del resto de Francia. Los glaciares franceses han perdido el 25% de su superficie en medio siglo y, a este ritmo, los científicos creen que casi no habrá más en 2100.
“Somos conscientes de cuánto tenemos que perder si no actuamos ahora”, declaró el ministro. “Si bien 2025 será el año internacional de la conservación de los glaciares, ahora es el momento de actuar”, añadió al presentar su plan.
La primera parte se refiere a la prevención de los riesgos relacionados con los glaciares, incluida “la creación de lagos y bolsas de agua subterránea que pueden romperse repentinamente y fluir hacia el valle”. Para protegerse contra esto, el ministerio recomienda “resolver dudas” en las 360 zonas de riesgo identificadas para los Alpes.
550 glaciares
Según los glaciólogos, Francia tiene unos 550 glaciares, un “pequeño puñado” de los cuales pueden considerarse potencialmente peligrosos para las poblaciones que viven aguas abajo. En el pasado ya se llevaron a cabo operaciones de drenaje de lagos glaciares, especialmente en el Mont-Blanc.
Segundo eje: el gobierno pretende proteger mejor los glaciares y los espacios naturales que surgirán tras su retirada, promoviendo así “la biodiversidad (que) se está restableciendo en territorios completamente vírgenes”. Según los científicos, estos espacios tendrán un “papel importante” que desempeñar en el futuro en la mitigación y adaptación al cambio climático.
Finalmente, el plan prevé fortalecer el apoyo estatal a los territorios montañosos.
El gobierno espera liberar fondos para estas acciones “examinando todos los mecanismos existentes, en particular el fondo Avenir Montagnes, para que contribuya más a la adaptación al cambio climático en las montañas”, según el gobierno.
