Christian Ploux está muy implicado en la ciudad y dirige el taller de pintura del centro cultural.
Pintor desde 1993, explica: “Sólo pinté sobre lienzo a partir de 1993, pero comencé a hacerlo antes sobre azulejos de barro”en ese momento tenía 21 años. No es coincidencia “Mi formación como mosaiquista y mi trabajo me llevaron naturalmente hasta allí”. En 2008 se trasladó a Comigne con su esposa Valérie. Esta pareja del Franco Condado ya estaba de vacaciones en Aude.
Cuando se le pregunta cómo concibe su arte, con voz apasionada responde: “para mí el arte es infinito”. Y la infinidad del arte, lo ha explorado sin cesar desde 1993, “No siempre podía pintar lo mismo, así que comencé a explorar otras técnicas”. No sólo los exploró, sino que los dominó en gran medida sobre lienzos coloridos, pasando del realismo al surrealismo, combinando colores y técnicas, pintando según sus pasiones. Él encuentra su inspiración “Mientras caminaba con Valérie. Sabes, memorizo bien las cosas”. Su novedad más importante es su exposición en las paredes del Idiot du Village de Capendu. Durará desde el viernes 17 de enero al 23 de febrero y será visible durante el horario de apertura del establecimiento.
