Un potente terremoto de magnitud 6,8 sacudió el martes 7 de enero la región del Himalaya del Tíbet, en el suroeste de China. Los daños materiales son importantes. Según la televisión pública china CCTV, “Los temblores se sintieron con mucha fuerza en el cantón de Dingri y sus alrededores y muchos edificios se derrumbaron cerca del epicentro”. El costo humano también es significativo. De acuerdo a El mundo que relata los hechos, al menos cincuenta y tres personas murieron y sesenta y dos resultaron heridas.
Los servicios de emergencia ya se han movilizado al lugar. La agencia de noticias Nueva China dijo que las autoridades locales iban a desplazarse a las diferentes comunas del cantón de Dingri. “para evaluar las repercusiones del terremoto”. Además, la agencia precisa que se envió urgentemente a la zona ayuda médica, tiendas de campaña de algodón y colchas.
Dingri, un territorio con un clima extremo
El cantón de Dingri tiene la particularidad de estar situado a gran altura, no lejos del lado chino del Everest, detalla El mundo. En esta época del año las temperaturas van de un extremo a otro para los 62.000 habitantes que allí residen. Durante el día, el mercurio promedia 8 grados y desciende a casi -18°C una vez que cae la noche. La región de Dingri no es ajena a los terremotos dada su ubicación en la cordillera del Himalaya, pero el terremoto del 7 de enero se considera el más potente registrado en un radio de 200 kilómetros en los últimos cinco años, según el Centro de redes sísmicas de China.
De acuerdo a El mundoLa intensidad del terremoto se sintió en lugares tan lejanos como Katmandú, Nepal. Otras zonas de Nepal también sintieron que la tierra temblaba bajo sus pies. “Aquí tembló bastante fuerte, todos están despiertos pero no tenemos constancia de ningún daño por el momento”. dijo Jagat Prasad Bhusal, un funcionario de la región Namche, al noreste de Nepal. Hace diez años, un fenómeno sísmico similar, incluso más potente (magnitud de 7,8), azotó Nepal y causó casi 9.000 muertos y 22 heridos.
