Una fuerte tormenta arrojó fuertes nevadas y lluvias heladas el lunes sobre grandes zonas del este de Estados Unidos, interrumpiendo los viajes y el trabajo de millones de estadounidenses desde el valle de Ohio hasta la capital, Washington.
Unas 300.000 personas se quedaron sin electricidad desde Missouri hasta Kentucky y Virginia, mientras Según el sitio web FlightAware, más de 1.900 vuelos han sido cancelados y cientos retrasados.
La tormenta azotó por primera vez el Medio Oeste durante el fin de semana, cubriendo estados como Kansas, Nebraska e Indiana con nieve y hielo. Se informaron condiciones de tormenta de nieve en Missouri y Kansas, y se esperan hasta 14 pulgadas de nieve en algunas áreas. Los fuertes vientos, que alcanzaron los 12 kilómetros por hora, empeoraron la situación, haciendo peligroso para los ciudadanos y autoridades desplazarse para atender la emergencia.
Se espera que las temperaturas caigan en picado, en algunos lugares por debajo de cero grados Fahrenheit (menos 18 grados Celsius), mientras que las fuertes ráfagas de viento aumentan los peligros. El mercurio podría caer varias decenas de grados por debajo de las normas estacionales hasta las costas estadounidenses del Golfo de México.
La tormenta afectó significativamente al transporte aéreo y ferroviario
El operador Amtrak canceló más de 20 trenes el domingo y espera más cancelaciones el lunes. Se cancelaron casi 200 vuelos en el Aeropuerto Internacional Lambert en St. Louis, Missouri, y se espera que los retrasos se extiendan a todo el país. La combinación de nieve, aguanieve y lluvia helada hizo que las carreteras fueran peligrosas, lo que llevó a las autoridades a desaconsejar los viajes innecesarios.