¿Qué futuro para la viticultura francesa?

¿Cuál es el impacto regional?

• Champán : caída del 46% respecto a 2023 y del 31% respecto a la media de cinco años, debido a la falta de sol, las heladas primaverales y las fuertes lluvias.
• Languedoc-Rosellón : descenso del 9%, impactado por la persistencia de la sequía y el mildiú.
• Borgoña-Beaujolais : descenso del 38% respecto a 2023, debido principalmente al mildiú y al exceso de precipitaciones.
• Burdeos : caída del 12% ligada a la reducción de superficies de viñedo, coulure, millerandage, mildiu y granizo.
• Alsacia : descenso del 13% debido a la dificultad de floración y al ataque de mildiú.
• Valle del Loira : disminución del 29%.
• Suroeste y Sureste : descenso general, en particular un -11% en Provenza, afectada por el millerandage, las heladas tardías y el mildiú.

El Gobierno ha propuesto, como “solución” a la crisis, un plan de arranque de 120 millones de euros, que debería eliminar cerca de 30.000 de las 800.000 hectáreas de viñedos franceses. Un “desamor” para los productores a los que siempre estamos sujetos a medidas paliativas que apuntan, en última instancia, a la liquidación de nuestros sectores de excelencia.