No es el aumento de los precios del oro negro lo que está acaparando los titulares internacionales, sino el vertiginoso aumento de los precios del café y el cacao. Un hecho bastante sorprendente para muchos consumidores. De hecho, el precio del Arábica (la principal variedad de café con el 60% de la producción mundial), apreciado por muchos marroquíes, está en su nivel más alto desde 1977.
En el mercado mundial, 450 gramos de Arábica se cotizan a 327 céntimos de dólar, frente a los 200 céntimos de dólar del año anterior. Lo que representa un aumento de 127 centavos.
Aún más revelador: la diferencia de precios entre Arábica y Robusta (40% de la producción mundial) se ha reducido considerablemente, en parte debido al aumento de los precios de la variedad Robusta.
La diferencia de precios ha pasado de 100 céntimos a 30 céntimos en la actualidad. Una de las principales razones del aumento de los precios de ambas variedades de café es la sequía y el cambio climático (interrupción de las precipitaciones) que experimentan los principales países productores de café (Vietnam, Brasil, Centroamérica, etc.).
Sin embargo, desde hace 3 años, según los especialistas, el balance cafetalero mundial es deficitario (la demanda es mayor que la oferta). Tenga en cuenta que el aumento de la demanda asiática ha aumentado significativamente la presión sobre los precios del café a escala mundial.
Otro factor que explica la inflación de los precios: los tostadores, que prevén una exacerbación del déficit de oferta para la actual campaña agrícola, están haciendo compras preventivas en los mercados mundiales para reforzar sus existencias. Lo que, obviamente, aumenta la presión sobre la demanda y hace subir los precios.
Dada la situación actual, no sería sorprendente ver un aumento en los precios del café en los pasillos de alimentos en los próximos días o meses.
Al final, lo mismo ocurre con los precios del cacao, que alcanzaron máximos históricos debido a las malas cosechas en los principales países productores que sufren los efectos del calentamiento global (Brasil, Ghana, Costa de Marfil, etc.).
