Vencer el último segundo Por Feignies-Aulnoye (N2), Gallia Lucciana se despide de la aventura de la Copa de Francia. Los hombres del dúo Steven Inzerillo / Jean-Claude Cloët merecía algo mejor, Pero la magia de la Copa no había puesto su mirada en los corsos, que aún así pueden irse con la frente en alto.
Gallia lo habrá creído, casi lo habrá visto, esta 32ª final. Pero para él no hubo magia, ya que fue en última instancia en la amargura donde terminó el paréntesis encantado de los corsos que nunca habían llegado a esta etapa de la prueba. Las esperanzas se evaporaron en el tiempo añadido, cuando Felice Zamboni tuvo dificultades para apagar el último fuego del norte, pero se encontró empujando el balón hacia su propia portería (1-0, 90+4). Como una puñalada que marca el final de una epopeya histórica para los hombres de Jean-Claude Cloët, atónitos, en el suelo, mientras el banquillo finés se jactaba de celebrar su clasificación.
El cielo cayó sobre sus cabezas
Los Luccianinchis casi nunca soñaron con vivir este cruel desenlace ni por un solo momento, ya que tenían las armas para concederse también el derecho a soñar. ¿La brecha de una división? Borrado rápidamente. Pero al final, eso no es suficiente para ofrecer las sensaciones tan buscadas de un 32 con la potencial recepción de un gigante del fútbol francés. En los pasillos del estadio rural Didier Eloy, Jean-Claude Cloët no quiso Recuerda sólo lo positivo. El de haber hecho honor a la camiseta rojiblanca, aunque su tropa vistió de azul para la ocasión.
El muchacho tuvo bastantes razones para darse por satisfecho con una primera parte en la que su equipo dominó el centro del campo. Apenas sintió escalofríos, salvo las temperaturas invernales que asomaban sus feas cabezas en el Sambre. Mejor aún, eran ellos quienes estaban en mejor posición para pretender ir a buscar algo.
Pero el regreso al campo fue un poco más difícil, era necesario apriete los tornillos detrásjugar tiros completamente al frente, como cuando Robic, perfectamente lanzado en profundidad, se topó con el portero contrario (65º), pero sobre todo contar con los talentos de menozzi que buscó el balón por la escuadra a veinte minutos del final para dejar con vida a sus compañeros. Pero el portero corso no tuvo el mismo éxito cuando el central norte Kouadio desbordó sus 45 escobas para centrar a Zamboni y hacer pasar a Feignies-Aulnoye, que había ya liderando en penales. La felicidad cayó un poco antes de lo esperado en el Sambre, y el los arrepentimientos serán eternos para Galia Luciana.
“Salimos con la frente en alto, con mucho orgullo”
Jean-Claude Cloët (entrenador de Gallia Lucciana): “Es un resultado cruel, pero por eso también amamos este deporte. Salimos con la cabeza en alto, con mucho orgullo, se hubieran merecido algo mejor. Estábamos aquí para jugar, ofrecimos el juego, respetamos el juego”. plan. Ahora lo digeriremos y seguiremos adelante”.
Maxime Zamboni: “Recibimos un gol por un error por descuido. Puede que sea por cansancio, pero podemos estar satisfechos con lo que demostramos, aguantamos 94 minutos contra un N2. Tuvimos oportunidades que no pudimos aprovechar, es una pena y no Vuelvo con algunos arrepentimientos.”
Sofiane Bella: “Estamos decepcionados porque no hemos sido recompensados por nuestros esfuerzos. Estamos orgullosos de nuestra actuación. Vimos que tenían fallos. No fueron muy peligrosos, pero en un giro del destino al final del partido lograron marcar, nosotros Podría haber ganado.”
Feignies (N2) – Gallia Lucciana (N3): 1-0 (0-0) Stade Didier Eloy. 350 espectadores. Árbitro: M. GazonPero: Zamboni (90+4, csc) Advertencias: Catoire (16), F. Zamboni (29) a Luccianna; Ndoye (18º) en Feignies FEIGNIES-AULNOYE: Bernard (Plumain 90+4); Lescroart (Dufour 63), Wackers, Kouadio, Ndoye; Ouattara (jefe); Chah, De Parmentier (Aabbeddou 63e); Koubemba (Colin 75), Sambou (Leseine 90+4). Entrenador: Krzysztof Ziecik. GALLIA LUCCIANA: Menozzi; Catoire (Haro 75), F. Zamboni, Brunet (F. Zamboni 90), Tournier; Sonnerat, Schuster, Ivaldi (director); Bourouis (Saffour 63e), Robic, Vittori. Entrenador: Jean-Claude Cloët.