El ejército israelí anunció el sábado la muerte de ocho soldados, fallecidos en la explosión de su vehículo cerca de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, uno de los mayores saldos para el ejército en ocho meses de guerra contra el Hamas palestino.
Estos ocho soldados “fueron asesinados” a las 5:15 horas al noroeste de Tal al-Sultan, en la región de Rafah, indicó el ejército en un comunicado publicado el sábado por la noche.
El vehículo blindado en el que se encontraban los militares “fue alcanzado tras la explosión de una bomba”, precisa la misma fuente. En el vehículo había artefactos que contenían, en particular, “materiales explosivos”, añade.
“La explosión fue sustancial”, escribió el ejército, afirmando que podría haber sido causada por la detonación de estos materiales explosivos y que se está llevando a cabo una investigación.
“Se supone que todo esto no debería suceder”, indica también el ejército y esta “gran explosión dificultó la identificación y localización de los cuerpos” de los soldados.
Según el contralmirante Daniel Hagari, portavoz del ejército israelí, la explosión se produjo “visiblemente por un artefacto explosivo instalado en la zona o por el disparo de un misil antitanque”.
Entre los soldados que murieron se encontraba el capitán Wassem Mahmoud, de 23 años, según el ejército.
“Sus familias han sido notificadas”.
– “Pérdida colectiva” –
“Toda la nación israelí abraza a sus queridas familias en este momento difícil”, respondió el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, según un comunicado de su oficina.
Netanyahu reiteró los “objetivos de la guerra”, citando en particular la destrucción de las capacidades militares y de gobierno de Hamás y el regreso de los rehenes.
El ejército israelí lanzó un asalto contra la ciudad de Rafah, en el extremo sur de la Franja de Gaza, el 7 de mayo, lo que provocó fuertes críticas de la comunidad internacional.
Desde el inicio de la ofensiva terrestre israelí en la Franja de Gaza el 27 de octubre, 306 soldados han muerto, incluidos los ocho soldados que murieron el sábado, una de las peores cifras para el ejército israelí en un solo día.
El 22 de enero, 21 reservistas murieron durante un único ataque llevado a cabo por Hamás. En total ese día, 24 soldados murieron en combates en la Franja de Gaza, según el ejército, la jornada más mortífera para Israel desde el 27 de octubre.
“Cada soldado que muere es como si muriera alguien de nuestra familia. Lo vivimos como una pérdida colectiva”, reaccionó a la AFP Graciela Barchilon, de 68 años, que llegó este sábado por la noche a Tel Aviv para manifestarse con miles de personas contra el gobierno de Benjamín. Netanyahu.
“Siento mucha ira y decepción”, añadió, pidiendo la celebración de nuevas elecciones.
La guerra fue desencadenada el 7 de octubre por el ataque del movimiento islamista palestino perpetrado desde la Franja de Gaza, en el sur de Israel, que se saldó con la muerte de 1.194 personas, en su mayoría civiles, según un recuento de la AFP elaborado a partir de datos oficiales israelíes.
De las 251 personas secuestradas ese día, 116 siguen como rehenes en Gaza, de las cuales 41 están muertas, según el ejército.
En represalia, el ejército israelí lanzó una ofensiva a gran escala en Gaza que dejó 37.296 personas muertas, en su mayoría civiles, según datos del sábado del Ministerio de Salud del gobierno de Gaza liderado por Hamás.
