(COMBO creado el 12 de abril de 2024) Donald Trump en Nueva York el 25 de marzo de 2024 y Stormy Daniels el 12 de octubre de 2018 en Berlín (POOL / Mary Altaffer)
El expresidente estadounidense Donald Trump, declarado culpable por un jurado de Nueva York esta semana, afirmó en una entrevista difundida el domingo que una pena de prisión podría ser “un punto de quiebre” para sus seguidores.
El candidato presidencial republicano advirtió en noviembre en Fox News que una sentencia de prisión “sería complicada de aceptar para el público. Ya sabes, en cierto punto, hay un punto de ruptura”.
Estas palabras tienen particular resonancia en un país todavía marcado por el ataque al Capitolio el 6 de enero de 2021, cuando los partidarios de Trump intentaron impedir la certificación de la victoria electoral de su rival demócrata Joe Biden.
También llegan en un momento en el que el magnate empresarial de 77 años utiliza una retórica cada vez más violenta hacia sus oponentes.
El funcionario electo demócrata Adam Schiff afirmó que con sus comentarios Donald Trump estaba “claramente” incitando “a la violencia una vez que se conoce su juicio”.
Uno de los hijos del expresidente, Eric Trump, dijo que el asunto estaba convirtiendo a su padre en “un mártir”.
“El pueblo estadounidense no es estúpido” y “ve exactamente lo que está pasando”, aseguró.
En su primera reacción tras el veredicto, la ex actriz porno implicada en el asunto que llevó a la declaración de culpabilidad de Donald Trump pidió a los tribunales que la encarcelaran.
“Meterlo en la cárcel”, afirmó Stormy Daniels, de 45 años, en el sitio web del periódico británico Daily Mirror.
– “Muy duro” –
El expresidente estadounidense Donald Trump con sus abogados durante el juicio donde fue condenado por falsificar documentos relacionados con sus pagos a la exactriz porno Stormy Daniels, en un tribunal de Manhattan el 3 de mayo de 2024 (POOL/Charly TRIBALLEAU)
Después de seis semanas de audiencias en un tribunal de Manhattan, un jurado declaró a Donald Trump culpable de 34 cargos de falsificación contable por pagos realizados a finales de 2016 a Stormy Daniels para que guardara silencio sobre un encuentro sexual que ella dijo haber tenido con él en 2006.
Trump niega categóricamente esta relación.
Este veredicto, el primero en un proceso penal en la historia de Estados Unidos contra un expresidente, no impedirá que el multimillonario sea candidato presidencial contra Joe Biden.
Pero Donald Trump inmediatamente dejó estallar su ira y denunció un juicio “muy injusto” e incluso manipulado, sin aportar la más mínima prueba.
También acusó a Joe Biden y su “pandilla” de ser “enfermos” y “fascistas” responsables de sus reveses legales.
En la entrevista difundida el domingo, el expresidente afirmó también que su reciente juicio había sido “muy duro” para su esposa Melania, cuya ausencia se notó entre los miembros de su familia que acudieron a apoyarle ante el tribunal.
– “Saco de boxeo” –
Stormy Daniels abandona el tribunal de Manhattan tras su testimonio, 9 de mayo de 2024 (AFP/Charly TRIBALLEAU)
En cuanto a Stormy Daniels, cuyo silencio desde el veredicto del jueves ha sido muy sonado (normalmente no duda en comentar en tono brusco los problemas legales de Donald Trump), acabó reaccionando al Daily Mirror.
“Creo que debería ser condenado a prisión y a realizar servicios comunitarios para los menos afortunados, o servir como saco de boxeo voluntario en un refugio para mujeres”, añadió con su habitual libertad de tono.
En los últimos días permaneció en un segundo plano y permitió que su marido y su abogado hablaran en los medios. Ambos hombres sugirieron que la aprensión, incluso el miedo, no estaba ajena a su silencio.
Stormy Daniels dijo recientemente que había recibido amenazas de muerte desde que Donald Trump fue acusado.
También consideró en la entrevista con el Daily Mirror que el candidato republicano estaba “completa y totalmente desconectado de la realidad”.
Testificar ante el tribunal “fue muy intimidante, con los miembros del jurado mirándote”, dijo Stormy Daniels, “pero como dije antes, dije la verdad todo el tiempo”.
El testimonio de Stephanie Clifford, su nombre real, fue uno de los puntos altos de los debates. En particular, contó detalladamente la supuesta relación sexual, según ella consentida pero donde el “equilibrio de poder” estaba “desequilibrado”.
“Esto nunca terminará para mí”, dijo. Puede que Donald Trump sea declarado culpable, pero “todavía tengo que vivir con este legado”.
