Los precios del petróleo cayeron el viernes, en un mercado decepcionado por las nuevas medidas chinas para apoyar la economía y carente de un catalizador para reactivarse. El precio del barril de Brent del Mar del Norte, para entrega en enero, cayó un 2,33%, para cerrar en 73,87 dólares. El precio del barril de American West Texas Intermediate (WTI), que vence en enero, cayó un 2,73%, hasta 70,38 dólares.
Para Duncan Wrigley, analista de Pantheon Macroeconomics, el desplome del oro negro se debe a los anuncios del Gobierno chino, que ha prometido 10.000 millones de yenes (unos 1.400 millones de dólares) para refinanciar a las autoridades locales y permitirles endeudarse más. “La reacción inicial del mercado fue de decepción”explicó el analista, destacando que la mayoría de las materias primas estaban en números rojos. “Los inversores esperaban un plan de recuperación a gran escala que incluyera medidas de apoyo al consumo”comentó, en una nota.
riesgo de contagio
Desde hace varias semanas, el Gobierno chino ha ido incrementando sus anuncios, pero hasta ahora se ha limitado a bajar los tipos de interés, emitir deuda o relajar las restricciones regulatorias a los bancos para animarles a prestar. “Mientras no fortalezcan el poder adquisitivo de la población, seguirán luchando”advirtió Matt Smith, analista de Kpler. Según Commerzbank, las importaciones chinas de petróleo crudo cayeron un 9% interanual en octubre. Este es el sexto mes consecutivo de contracción.
Para Matt Smith, el petróleo también estuvo bajo presión el viernes por la sensación de que la prima de riesgo geopolítico a corto plazo se está reduciendo después de las elecciones presidenciales en Estados Unidos. “Puede que no haya decisiones importantes sobre Ucrania y Oriente Medio cuando Trump asuma el cargo”desarrolla el analista. el mercado “todavía estoy tratando de entender” Lo que una nueva presidencia de Donald Trump puede cambiar para los precios del oro negro, según Matt Smith. Mientras tanto, los fundamentos siguen siendo “malo”con una plétora de oferta y una demanda incierta.
El mercado amenaza con caer en una posición de contango, lo que significa que los precios a corto plazo serían más bajos que los de los contratos de entrega a distancia. Esta configuración generalmente refleja un mercado en el que la oferta es mayor que la demanda en el plazo inmediato, y los productores esperan un aumento de los precios en el mediano plazo, lo que puede empujarlos a acumular barriles.