Por primera vez esta temporada, el Girondins de Bordeaux podrá contar con el apoyo de su afición en el campeonato. Una autorización que trastoca hábitos dentro del Nacional, como en Granville.
Incongruente en el campeonato Nacional 2, Burdeos no deja indiferente a nadie. En cada partido, los rivales están impacientes por desafiar a los Girondins, pero también se recuerda a menudo que el club de Aquitania tiene, a pesar de sus colosales deudas, tiempo libre para poder permitirse jugadores de mayor nivel sin temer visiblemente nuevas sanciones relacionadas con sus intereses. presupuesto revisado. Antes del partido de este sábado por la noche en Granville, surge otro problema para el club manchego. Por primera vez, el Girondins pudo contar con el apoyo de sus seguidores visitantes. Las autoridades no prohibieron el viaje a los aficionados del Burdeos debido al pacto de no agresión firmado por las dos peñas rivales, los Ultramarines y las Puertas Norte de Burdeos.
Fanáticos que han hecho las paces, pero deben estar separados
Esto provoca un caos en Granville, que no es necesariamente el estadio ideal para esta experiencia, ya que no dispone de aparcamiento para los aficionados contrarios. Como resultado, se instalaron expresamente no una, sino dos plazas de aparcamiento en dos esquinas del estadio, separadas por 100 metros, con una visión limitada del campo. “ Crear dos parques desde cero también representa una verdadera inversión financiera, pero se hace todo lo posible para que también sea agradable para ellos, la idea es no encerrarlos en jaulas, incluso si necesariamente existen limitaciones de seguridad. », explica el director de comunicación de US Granville en Ouest-France. La prueba de que el pacto de no agresión firmado por los partidarios de Burdeos no genera confianza, ya que incluso los viajes de los grupos de partidarios se realizarán en convoyes separados. Los dos grupos de simpatizantes serán apoyados por la gendarmería en dos localidades separadas por 30 kilómetros en diferentes salidas de la autopista A84 y no deberán cruzarse ni una sola vez durante el día del sábado.
Limitaciones de seguridad, sacrificios también para el club local que redujo la capacidad de su estadio para poder instalar estas dos plazas de aparcamiento y que también debe pagar por la seguridad de la organización. Se esperan 2.500 espectadores para el partido y 300 aficionados del Burdeos, en un estadio con capacidad para 3.000 personas. Por no hablar de los listos que intentaron colarse en la venta de entradas del “Mónaco del Norte”, ya que un aficionado del Burdeos intentó comprar 150 entradas este fin de semana, antes de ser descubierto.