Este truco, cuyos detalles aún se desconocen, habilitaría Windows 7 y versiones posteriores, incluidas actualizaciones extendidas para Windows 10, así como las últimas versiones de Windows Server.
Queda por ver cómo frenará Microsoft este nuevo dispositivo, que no requeriría la instalación de archivos de terceros ni la modificación de algún componente del sistema.
Por supuesto, señalamos que la práctica de la piratería de licencias está prohibida. En Francia, se considera un delito de falsificación y los particulares están expuestos a duras penas: hasta tres años de prisión y una multa de 300.000 euros.
Sin embargo, es posible adquirir licencias de Windows y Office a precios reducidos y de forma totalmente legal. Existen plataformas del mercado gris especializadas en la reventa de licencias. La legalidad de estos mercados fue validada por la jurisprudencia en el caso entre la empresa alemana UsedSoft, revendedor de software para PC usado, y Oracle en 2012.
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