¿Sueñas con la realidad aumentada (AR) sin tener que llevar gafas adecuadas? Los investigadores de Singapur tienen la solución. Se trata de lentillas inteligentes cuyas pilas se recargan con las lágrimas de los ojos. Según la Agencia France Presse (AFP), investigadores de la Universidad Tecnológica de Nanyang (NTU) en Singapur han desarrollado una batería flexible tan delgada como una córnea humana. Una solución salina, idéntica a las lágrimas, es capaz de aportarles energía. Estas baterías se utilizarán para alimentar lentes de contacto conectados.
El objetivo de estas lentes de contacto inteligentes es poder mostrar información visible en la córnea. Si inicialmente tienen una finalidad terapéutica, luego podrían utilizarse como fuentes de información, juegos o incluso para tomar fotografías y realizar vídeos. Desde hace varios meses, los trabajos de la Universidad Tecnológica de Nanyang se centran en una batería que se recarga mediante líquido lagrimal, compuesto de agua y sales. Las lágrimas aumentarán la duración de la batería en una hora, estimada en 12 horas con una recarga convencional.
La batería tiene aproximadamente 0,2 milímetros de grosor. Está fabricado con materiales biocompatibles, lo que significa que no contiene cables ni metales tóxicos, como ocurre con las baterías de iones de litio o los sistemas de carga inalámbricos. El recubrimiento se basa en glucosa y reacciona con los iones de sodio y potasio contenidos en la solución salina. Se ha presentado una primera patente.
