Denunciar a los controladores del transporte público parisino como en Waze: esto es lo que ofrece Akha, una aplicación que recientemente causó sensación en X y TikTok. Lanzada hace más de un año, incluso se ha convertido en una de las aplicaciones más descargadas de su categoría.
Sin embargo, esta pequeña ayuda para evitar multas no es del gusto de todos. Valérie Pécresse, presidenta de Movilidades de Île-de-France (IDFM) y de la región, abordó el tema este lunes. En un tweet, anunció que avisaría a Google Play Store y AppStore para que eliminaran el programa de su plataforma. También explica que el IDFM tiene intención de presentar una denuncia. “Escandalizada por la aplicación “Akha”, que se hace llamar descaradamente el nombre de la señal de alarma de los narcotraficantes y facilita el fraude en el transporte localizando a controladores y fuerzas de seguridad”, protesta además Valérie Pécresse.
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Al igual que ocurre con los radares móviles en las carreteras, la ley prohíbe informar de la presencia de controladores de transporte público. El Código de Transportes prevé que “la difusión, por cualquier medio y cualquiera que sea el soporte, de cualquier mensaje que pueda indicar la presencia de controladores” se castiga con “dos meses de prisión y 3.750 euros de multa”.
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