Desarrollar músculo después de la jubilación: sí, es posible. Géraldine Zamansky, periodista de la Revista Salud de France 5, comparte con nosotros esta semana algunos resultados bastante alentadores.
-: ¿Resultados alentadores de una investigación danesa que movilizó a los “jóvenes jubilados”?
Geraldine Zamansky: Sí, 128 daneses, con una edad promedio de 71 años, lograron superar las probabilidades. La fuerza de sus piernas se mantuvo intacta, cuatro años después del inicio de un desafío original: hacer una hora de entrenamiento intensivo con pesas, tres veces por semana, en un gimnasio durante un año.
La regla: agotarse al final del número requerido de repeticiones del mismo ejercicio. Si conseguían hacer más: se aumentaba el peso levantado. Se trabajaron piernas, brazos, abdominales, todas las partes del cuerpo. Luego, se comparó su progreso con el de otro grupo, al que se le asignó la tarea de realizar los llamados ejercicios moderados, una vez en el hospital y dos veces en casa. Sin olvidar al tercer grupo que simplemente tuvo que continuar con sus actividades físicas habituales.
¿Y sólo las piernas expuestas a las máquinas de “tortura” conservaron su fuerza?
Absolutamente. Sin embargo, las esperanzas de mantener eran al menos tan importantes para el grupo “moderado”, como me explicaron Mads Bloch-Ibenfeldten el centro de este estudio de la Facultad de Medicina de Copenhague.
La idea era que tuvieran menos problemas para aguantar un año y, sobre todo, que siguieran después. Y así lo pensó Mads Bloch-Ibenfeldt cuando vio las primeras reacciones, a menudo muy negativas, ante las máquinas. Pero la emulación del grupo y el sentido del deber limitaron los abandonos. Algunos incluso aumentaron su masa muscular en 12 meses.
¿Es esa masa muscular la que permaneció más tiempo después de esfuerzos intensos?
Entonces, a nivel general, sí, el esfuerzo intenso en el gimnasio deja un cuerpo más musculoso cuatro años después. Pero este no es el caso de las piernas, cuyos músculos perdieron aproximadamente el mismo volumen en los tres grupos. Por lo tanto, con un tamaño equivalente, el paso por las máquinas habría mejorado y optimizado el funcionamiento de los músculos.
Sin embargo, esta fuerza conservada reduce el riesgo de caídas y la mortalidad asociada en las personas mayores. Porque una fractura puede tener consecuencias dramáticas. Así que nunca es demasiado tarde para trabajar intensamente los músculos, incluso en casa. Con botellas de agua a modo de mancuernas, y algún complemento económico, para las piernas por ejemplo. No olvide hablar primero con su médico.
Y para aquellos que no pueden o no quieren hacerlo, otro equipo de Copenhague descubrió que el ejercicio regular durante toda la vida también creaba músculos más eficientes y “más jóvenes” a la edad de 70 años. Y por supuesto, si es posible, empezar sin esperar a la jubilación…
El estudio
