Los prebióticos se definen como sustratos utilizados selectivamente por los microorganismos del huésped y que confieren un beneficio para la salud. Este concepto se introdujo en la investigación y dentro de la comunidad científica hace casi 30 años. Desde entonces, estas sustancias prebióticas han atraído considerable atención como posibles herramientas para mejorar la salud a través de la microbiota intestinal.
Dada la reciente y rápida expansión de las tecnologías de investigación de microbiomas de alta resolución y la creciente comprensión de cómo los compuestos y nutrientes de la dieta pueden afectar el microbioma, hoy hay confusión generaldestacó el equipo de investigación, sobre qué sustancias tienen efectos prebióticos reales.
El estudio, llevado a cabo por 8 expertos internacionales propone ahora un primer marco, lo más completo posible, compuesto por los criterios para establecer el estatus de los prebióticos, que proporciona una claridad esencial en este campo en rápida evolución.
Esta nueva recomendación también aborda los numerosos desafíos que quedan por documentar y justificar los efectos beneficiosos de los prebióticos y propone directrices prácticas para identificar mejor las sustancias prebióticas y evaluar mejor sus efectos sobre la salud.
Los investigadores también proponen un protocolo científico claro para demostrar los efectos de los prebióticos, que debe cumplir varios criterios esenciales :
- un prebiótico debe ser una sustancia bien caracterizada;
- proporcionar un beneficio de salud mensurable;
- ser utilizado selectivamente por microorganismos huésped;
- inducir efectos mensurables sobre la composición o función del microbioma;
- seguir un proceso de acción plausible que surja de cambios en el microbioma y conduzca al beneficio para la salud observado;
- ser seguro para la indicación prevista;
- al menos un estudio de huésped objetivo debe haber demostrado simultáneamente la modulación del microbioma y el beneficio para la salud asociado.
Esta necesidad de validación del uso selectivo y la respuesta del ecosistema microbiano a la “intervención prebiótica”
Es probablemente la directriz más importante de estas recomendaciones.
Sin embargo, los autores esperan que con el tiempo, y basándose en datos científicos, se implementen enfoques regulatorios y comerciales para los prebióticos.
Por lo tanto, nos queda un largo camino por recorrer para comprender qué son los prebióticos y cómo se debe justificar su uso, pero el proceso está en marcha.
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