Se utiliza con mayor frecuencia en invierno pero también es útil en primavera y verano contra las garrapatas.
Las garrapatas se adhieren a nuestra piel a través de su rostro, alimentándose de sangre durante varios días antes de desprenderse. Algunos pueden portar microbios que causan enfermedades, incluida Borrelia burgdorferi, la bacteria que causa la enfermedad de Lyme. Se caracteriza por síntomas como enrojecimiento en la zona de la picadura, dolor de cabeza, fiebre y dolores corporales. Afortunadamente, es posible protegerse de estas picaduras cubriéndose la piel con ropa larga. Usar aceites esenciales repelentes también es una buena idea.
Entre ellos, hay uno cuyo olor -ligado a su riqueza en terpenos- es especialmente eficaz para repeler insectos, ya sean mosquitos o garrapatas. Basta con diluir 2 gotas en 20 gotas de aceite vegetal y aplicar este preparado preventivo en las partes expuestas de la piel antes de la caminata, explica la veterinaria y farmacóloga Sylvie Hampikian. Este aceite también tiene la ventaja de ser antiinfeccioso y antiinflamatorio y, por tanto, proporciona alivio en caso de picadura. ¿Lo has descubierto?
Se trata del aceite esencial de árbol de té, también llamado “Tea Tree”. Es un aceite importante en invierno por sus potentes propiedades antibacterianas, descongestionantes y antivirales que lo convierten en un gran aliado contra las afecciones otorrinolaringológicas… pero también en primavera y verano para proteger contra las garrapatas. Y ella no es la única que tiene este beneficio. Además, si te cuesta soportar su fuerte olor, debes saber que puedes utilizar en la ropa los aceites esenciales de eucalipto radiante, eucalipto limón, hierba de limón de Java, menta o incluso palmarosa para mantener a distancia las garrapatas.
Generalmente los aceites esenciales incoloros no manchan la ropa, sin embargo, los de color pueden dejar marcas. Compruébalo previamente vertiendo una o dos gotas en tu mano. Finalmente, algunas precauciones a tener en cuenta. El aceite esencial de árbol de té no es para todos. No se recomienda para mujeres embarazadas y en período de lactancia, niños menores de 15 años y personas con epilepsia. Tampoco debe utilizarse sobre piel lesionada o dañada. Antes de su uso, se recomienda realizar una prueba cutánea en el pliegue del codo.
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