“Sé que es difícil, pero creo que es hora de que cada uno se ponga manos a la obra”. Invitado al informativo de las 20h en TF1 este viernes 6 de septiembre, el nuevo primer ministro Michel Barnier -de los republicanos- esbozó las líneas generales del gobierno que debe nombrar.
“No será sólo un gobierno de derechas”, afirmó, asegurando que “habrá gente de mi familia política, gente de buena voluntad de la mayoría saliente”. Tampoco descartó nombrar ministros de “izquierdas”.
“Hay buenas ideas en todas partes”
“En todas partes hay buenas ideas, hay que buscarlas en todas partes”, ha señalado, subrayando que “el sectarismo es un signo de debilidad”. “Hay que abrir la puerta y abrir la mesa a quien lo quiera”, ha declarado también.
En cuanto a la Agrupación Nacional, a la que “respeta”, subrayó la importancia de tener en cuenta a los “11 millones de franceses que votaron” por el partido de Jordan Bardella. “Su voz cuenta”, añadió.
Recién nombrado en Matignon, Michel Barnier inició este viernes consultas con su predecesor Gabriel Attal, ahora jefe del grupo macronista en la Asamblea Nacional, y los dirigentes de Los Republicanos (LR) que fijaron sus condiciones para participar en un gobierno.
Encargado de “formar un gobierno unificador al servicio del país”, este saboya de 73 años sabe que tiene el tiempo prestado y que tendrá que encontrar los equilibrios adecuados para no caer en la primera moción de censura.
Artículo original publicado en BFMTV.com
