Trece presuntos delincuentes retenidos en una prisión de Zambia han quedado libres desde que un oficial de policía borracho abrió su celda en la víspera de Año Nuevo y les aseguró que eran libres de irse, dijo la policía el viernes.
El policía, “en estado de ebriedad, tomó por la fuerza las llaves” de un colega y “abrió las puertas de las celdas de hombres y mujeres, ordenándoles que se fueran, alegando que eran libres de salir para el Año Nuevo. ”, según un comunicado policial.
De los quince presos afectados, 13 salieron corriendo de sus celdas la mañana del 31 de diciembre.
“Los sospechosos siguen prófugos”, declaró el viernes a la AFP el portavoz de la policía, Rae Hamoonga.
Entre ellos se encuentran “sospechosos procesados por delitos graves” y “el hecho de haberlos puesto en libertad podría suponer un riesgo importante para la seguridad pública”, añadió.
El policía fue detenido poco después de su iniciativa.
News-Swiss