La Bolsa de Nueva York cerró el miércoles con fuertes pérdidas, congelada por la gran cautela del banco central estadounidense (Fed), que se dispone a frenar significativamente el ritmo de sus recortes de tipos. El Dow Jones cayó un 2,58% y el índice Nasdaq un 3,56. % y el índice más amplio S&P 500, 2,95%.
La Bolsa de Nueva York cerró el miércoles con fuertes pérdidas, congelada por la gran cautela del banco central estadounidense (Fed), que se dispone a frenar significativamente el ritmo de sus recortes de tipos. El Dow Jones cayó un 2,58%, el índice Nasdaq un 3,56% y el índice más amplio S&P 500 un 2,95%.
Wall Street reaccionó muy mal a la comunicación de la Reserva Federal, que bajó su tipo de interés en un cuarto de punto pero ahora sólo prevé dos nuevos recortes el próximo año, mientras que contaba con cuatro en septiembre. El mercado, que hace una semana daba a la hipótesis de cuatro reducciones una probabilidad del 44%, ha recalibrado bruscamente sus proyecciones y avanza principalmente hacia dos reducciones como máximo.
El mercado de bonos tomó nota y el rendimiento de los bonos del gobierno estadounidense a dos años saltó al 4,34%, frente al 4,24% del día anterior al cierre. Los índices bursátiles se desplomaron. “La magnitud de este reflujo indica que la Reserva Federal tomó al mercado por sorpresa”, comentó Sam Stovall de CFRA. La Reserva Federal “ha reducido a la mitad su pronóstico de recortes de tasas y está insinuando que tendremos suerte si se hacen realidad”. “Esta es una nueva fase y vamos a ser cautelosos ante futuros recortes de tipos”, advirtió el presidente de la institución, Jerome Powell, durante su rueda de prensa. “El mercado está reaccionando al hecho de que la Reserva Federal admite que hay incertidumbre” sobre la trayectoria de su política monetaria, explicó Sam Stovall. “Y si la Reserva Federal se pregunta, ¿cómo pueden los inversores tener certeza?”
“Powell y otros no pueden permitirse el lujo de volver a equivocarse en materia de inflación mientras persistan los riesgos de una aceleración (de los precios)”, subrayó Charlie Ripley, de Allianz Investment Management, que les anima a la cautela. Jerome Powell también indicó que algunos miembros de la Fed habían incluido en sus previsiones los posibles efectos de las medidas de la futura administración Trump, que muchos esperan que sean de carácter inflacionario.
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Fiebre estos últimos días
Ya febril en los últimos días, el mercado de Nueva York se volvió aún más tenso el miércoles. El índice VIX, que mide el nerviosismo de los inversores, se disparó un 59%, un movimiento de rara violencia. “Es casi como si el mercado alcanzara su punto máximo a finales de noviembre”, observó Sam Stovall. “Esto podría alentar la toma de ganancias ahora. Quizás Santa ya se haya ido de vacaciones”.
El Nasdaq se vio especialmente afectado por la reacción, en particular Tesla (-8,28%) y los fabricantes de semiconductores Broadcom (-6,91%) y Micron (-4,33%), que habían sobrevivido hasta ahora. Se apuntaron a los valores más volátiles, como el fabricante de automóviles Rivian (-11,16%), la plataforma de intercambio de criptomonedas Coinbase (-10,20%) o el especialista en la venta de crédito online Affirm (-10,65%). Al Dow Jones le fue apenas mejor, registrando una décima sesión consecutiva en números rojos, la primera en 50 años. El venerable índice se vio lastrado especialmente por los valores financieros, para los que la persistencia de un entorno de tipos de interés elevados es un obstáculo.
Goldman Sachs (-4,25%), American Express (-4,50%) y JPMorgan Chase (-3,35%) vivieron así una sesión agitada. Paradójicamente, el grupo UnitedHealth, segundo peso en el Dow Jones, fue el único que obtuvo buenos resultados (+2,92%), su valoración se considera atractiva después de una caída del 20% desde el asesinato del jefe de su sector de seguros de salud, Brian. Thompson, en Nueva York, a principios de diciembre. En el resto de la Bolsa, el grupo agroalimentario General Mills (-3,06%) revisó a la baja sus previsiones anuales, debido al aumento de los gastos de promoción (-2,93%), tras unos resultados trimestrales mejores de lo esperado.