Este artículo fue traducido automáticamente de HIBAPRESS, la versión árabe:
Prensa Heba – Al Haouz
La comunidad de Ighil, situada en la provincia de Al Haouz, está experimentando un creciente estado de preocupación y cuestionamiento entre la población local, en cuanto al destino de la denuncia presentada por un cierto número de ciudadanos desde hace más de un año, de la cual se adjuntan copias. disponible para Hiba. Prensa, sobre el pisoteo de terrenos públicos en la rotonda de “Amerzgan”.
Estas tierras representan un patrimonio colectivo de gran valor social y económico para los residentes y se han convertido en el centro de una controversia generalizada después de que se recibieron informes de violaciones legales en estas tierras.
La denuncia dirigida al trabajador de la provincia de Al Haouz precisa que el interesado se extendió sobre una superficie de aproximadamente siete hectáreas, incluidos los parajes “Dawaykran” y “Ashbar”, donde procedió al vallado del terreno y al cierre de parte de la tierra. los caminos interiores sin obtener autorización legal alguna. Los demandantes también dijeron que el demandado arrancó deliberadamente los raros y perennes cipreses del Atlántico, que son árboles de gran valor ambiental.
Además, la denuncia hablaba de la posesión por parte del acusado de una sakia de tierra colectiva y su anexión a su propiedad privada, además de la excavación de tres pozos sin permiso, lo que tuvo un impacto negativo en el suministro de agua en la región.
Estos hechos despertaron preocupación entre los vecinos, quienes se preguntaban qué medidas tomarían las autoridades locales para proteger estas tierras colectivas y garantizar los derechos de las poblaciones de la región sobre ellas. Los ciudadanos han pedido una intervención urgente de las autoridades interesadas para detener cualquier violación que pueda perjudicar el interés público.
A la luz de estos acontecimientos, la cuestión de las tierras comunales en la comunidad de Ighil sigue siendo un tema delicado, ya que los residentes esperan que las autoridades regionales tomen medidas para poner fin a cualquier violación que amenace este importante patrimonio colectivo.
Morocco