Más de cuatro años después de que se denunciara el comportamiento de varias estrellas del mundo del espectáculo quebequense durante el escándalo #MeToo, un informe elaborado por dos profesores de la Universidad de Quebec en Montreal concluye que la violencia sexual (VACS) afecta a la cultura más que a otros lugares de trabajo.
“El entorno cultural de Quebec revela una presencia alarmante de VACS” y su gravedad es “singular”, se aprende en este informe, titulado 3,2,1…¡Acción!fruto del trabajo de las investigadoras de la UQAM Vanessa Blais-Tremblay y Joëlle Bissonnette, en colaboración con ADISQ y la Asociación de Profesionales de la Industria del Humor (APIH).
Palabras sexuales inapropiadas, miradas insistentes, voyerismo, gestos y agresiones sexuales: “[comparativement] En comparación con otros lugares de trabajo, los datos recopilados por el equipo de investigación muestran que la situación sería incluso peor en la cultura que en otros lugares”, afirman los investigadores, que consultaron más de 700 estudios, artículos y artículos de revistas.
En los últimos años, varias personalidades quebequenses, entre ellas Éric Salvail, Gilbert Rozon, Maripier Morin y Julien Lacroix, han sido denunciadas públicamente por acoso o conducta sexual inapropiada.
“Estas denuncias han sensibilizado a la comunidad”, afirma Joëlle Bissonnette en una entrevista.
Más común en televisión y cine.
Este informe, presentado el martes por la mañana, se produce tras la celebración de la Cumbre sobre la violencia y el acoso sexual en la cultura en Quebec, en la que participaron 50 organizaciones que trabajan en el sector cultural, en septiembre de 2023.
El documento recoge datos de 2020 a 2024 de L’Aparté, la filial de Juripop que ofrece apoyo a las personas víctimas o testigos de acoso o violencia en el sector cultural, según los cuales cuatro sectores están “sobrerrepresentados” en el denuncias: cine y televisión, teatro, artes visuales y música.
Vanessa Blais-Tremblay se sorprendió al descubrir que las personas que trabajan en la cultura ignoraban que las relaciones laborales estaban reguladas.
“Muchos piensan que depende de sus decisiones individuales establecer el límite de lo que es aceptable o no. Sin embargo, la violencia sexual es un concepto que tiene peso legal”, afirma.
Gestos estandarizados
De hecho, los participantes en la Cumbre informaron sobre las VACS cotidianas, que se definen como “un conjunto de acciones inapropiadas en el lugar de trabajo, en el entorno de aprendizaje o de ocio que suelen ser “disimuladas”, “insidiosas”, pero que son recurrentes y persisten en el tiempo. “
Aunque no requieren intervención policial, se lamenta que tiendan a “normalizarse”.
Proponemos numerosas acciones para detener las VACS, recordando que “sin embargo, el sistema judicial está lejos de ser el único ámbito en el que debe librarse la lucha contra las VACS en la cultura”.
Los autores dicen haber observado que la industria cultural estaba lista para pasar de las palabras a la acción. “Están cansados de que el entorno esté polarizado y quieren reparar los puentes que se han roto con cada ola de denuncias mediante un gran proyecto colectivo”, opina M.a mí Blais-Tremblay.
Extractos del informe
- “Casi la mitad de las mujeres que respondieron a un estudio sobre la industria de la comedia informaron haber tenido una experiencia de gestos de naturaleza sexual”.
- “La agresión sexual puede manifestarse de diferentes maneras. En el mundo de la improvisación, Emmanuelle Walsh-Viau menciona haber sido una de “aquellas a las que un compañero de equipo les agarraba los pechos en plena improvisación y quería hacer reír al público”. En la industria de los videojuegos, la campeona de Quebec, Stéphanie Harvey, cuenta que otro jugador le “atrapó” el trasero durante una competición.
- “Según los participantes en la Cumbre, la cobertura mediática de las VACS percibidas como “más graves” (agresiones sexuales, delitos penales) contribuyó, al impactar a la comunidad, a allanar el camino a una mayor sensibilidad ante los gestos, las palabras y las acciones. connotaciones sexuales que antes se percibían como inocuas, ancladas “en la cultura””.
Fuente: “3, 2, 1… ¡Acción! Un enfoque concertado para combatir la violencia sexual en la cultura de Quebec”, diciembre de 2024.