En el Standard, la afición lleva mucho tiempo esperando poder volver a alegrarse. Esta vez, tal vez tengan una razón para hacerlo.
Durante el partido del fin de semana pasado contra el Círculo de Brujas, Ivan Leko tomó una decisión que todavía parecía imposible antes del parón internacional. El técnico decidió volver a titular a Arnaud Bodart, que estuvo muchos meses sin jugar.
Una experiencia beneficiosa
Una elección rentable con un portero que aportaba confianza a su defensa y al equipo en general, donde Matthieu Epolo había sabido sembrar dudas en las últimas semanas con varios errores iniciales que le costaron caro.
Y Philippe Albert no se equivocó sobre el desempeño de Bodart: “Su experiencia fue beneficiosa para él. Para un portero que pasa varios meses sin jugar, nunca es fácil recuperarse. Jugó con sencillez y realizó paradas cuando fue necesario para mantener a su equipo”. a flote.”
“La norma ha encontrado al jefe”
También presente en el plató de ‘La Tribune’, Marc Wilmots coincidió: “Tiene confianza en el Standard. El público de Sclessin siempre le ha adorado. Desde su primera intervención, el público estuvo con él. Es un hijo del casa. No tiene miedo y tranquilizó a todos.
Para Cécile De Gernier, no hay duda de que el Standard ha encontrado por fin al jugador que le faltaba, aquel que es capaz de aportar carisma a un grupo que carece de él: “La defensa del Standard ha encontrado un jefe. Es un equipo que carece de carisma, y lo tiene.”
En cuanto a lo que Rouches tendrá que hacer con Epolo, Wilmots concluyó: “Hemos descubierto un buen portero en ciernes en Epolo. Nada es definitivo en el fútbol. El personal está allí para apoyarlo. El Standard ahora tiene dos buenos porteros, esa es la lo más importante”.