Los electores de la ciudad suiza de Basilea aprobaron el domingo, por abrumadora mayoría, la financiación de cerca de 40 millones de euros para la celebración en su ciudad del programa televisivo de Eurovisión, que promete, por tanto, para su edición de 2025, celebrarse con todos su pompa habitual.
Los resultados provisionales de la votación muestran que el 66,4% de los electores de esta ciudad del norte de Suiza están a favor de utilizar 34,96 millones de francos suizos (37,4 millones de euros) con dinero de los contribuyentes para organizar el espectáculo.
Sin la financiación de la ciudad anfitriona, el evento televisivo, que atrae a una enorme audiencia mundial, se habría visto significativamente truncado. Suiza ganó Eurovisión 2024 en Suecia con la victoria del artista no binario Nemo y acogerá la edición de 2025 en mayo en esta ciudad del Rin, en la frontera entre Francia y Alemania. Las autoridades esperan obtener beneficios inmediatos de 60 millones de francos.
La Unión Democrática Federal (UDF), un pequeño partido que defiende “los valores cristianos eternos”, lanzó un referéndum para denunciar un “verdadero despilfarro” de dinero público. El partido, calificado de ultraconservador por la prensa suiza, también había esgrimido argumentos morales y de seguridad.
En caso de rechazo de la aportación de la ciudad, el evento previsto durante diez días se habría reducido “a un gran espectáculo televisivo el sábado por la noche”, sin la organización de actos públicos fuera del escenario principal, advirtió el responsable de comunicación de Eurovisión 2025. , Edi Estermann.
“Somos una ciudad de arte, de bellas artes, pero también de música. Sigue siendo muy importante para nuestra ciudad.“, argumentó Andrea Strahm, abogada y miembro del parlamento de Basilea.
Referéndum de Eurovisión Suiza LGBTQIA+