La supervivencia de la prensa escrita regional está amenazada, considera Le Courrier. Para el diario ginebrino, es urgente actuar y encontrar soluciones de apoyo para preservar la información plural y evitar la formación de un desierto periodístico.
“Decidimos tomar la iniciativa porque la historia tartamudea”, señaló el lunes Philippe Bach a los medios de comunicación. El redactor jefe de Courrier recordó los años difíciles vividos por la prensa escrita, especialmente en Ginebra, con desaparición de títulos, fusiones y reestructuraciones de series.
Los políticos están consternados por esta evolución, pero parecen impotentes frente a ella, explicó Philippe Bach. Para iniciar el debate, Le Courrier organiza el miércoles una velada para discutir posibles medidas de apoyo a la prensa, en presencia de la presidenta del Gobierno ginebrino, Nathalie Fontanet.
El periódico ginebrino ya tiene algunas ideas al respecto. En particular, le gustaría romper el tabú de la ayuda directa a la prensa. Esta ayuda directa ya está en vigor en Francia, así como en los países nórdicos y en Alemania, señaló Philippe Bach. También existen para audiovisuales.
El precio de lo digital
La redacción del diario ginebrino también considera que se debe ayudar a la prensa escrita en su transición digital. De hecho, los títulos son los más afectados por los nuevos métodos de lectura, con la creciente importancia de los teléfonos móviles, subrayó Philippe Bach. Esta adaptación, sin embargo, tiene un coste elevado.
Si no se hace nada para aliviar a la prensa escrita regional, la situación sólo empeorará para ellos. Hay que tomar medidas rápidamente porque hay una emergencia, señaló Julien Rey, director administrativo de Courrier. El diario ginebrino, por ejemplo, está en la cuerda floja.
El ejercicio 2024 arroja actualmente un déficit de 200.000 francos. Hoy en día, tres cuartas partes de los ingresos diarios provienen de las suscripciones al periódico en papel, pero estos ingresos disminuyen un 5% anual y no se compensan con las suscripciones al periódico digital, indicó Julien Rey.
Un periódico en peligro a partir del próximo año
Le Courrier podría encontrarse en “aguas muy turbulentas a partir del año que viene”, insistió Julien Rey. Además de las suscripciones, el periódico ginebrino funciona gracias al dinero de las suscripciones y donaciones, así como a través de colaboraciones con las autoridades públicas. Pero eso no es suficiente.
En otros cantones han surgido medidas de apoyo a la prensa escrita regional. En Friburgo, una ley ofrece, por ejemplo, un abono a los jóvenes de 18 años. La ciudad de La Chaux-de-Fonds, por su parte, proporciona una ayuda financiera de dos formas, lo que corresponde a una contribución de 2 francos por habitante.
ats/ther