No todas las residencias de ancianos pueden acoger a beneficiarios de asistencia de vivienda social (ASH). Las residencias de ancianos autorizadas para recibir asistencia social (todas las residencias de ancianos públicas y la mayoría de las residencias de ancianos asociativas) acogen no sólo a los beneficiarios del ASH sino también a las personas que no tienen derecho a esta ayuda.
Desde 2005, estos establecimientos pueden fijar libremente una tarifa de alojamiento para los residentes que no sean beneficiarios del ASH. Para regular este precio, la residencia de ancianos tuvo que celebrar un convenio de asistencia social con el consejo departamental de su ubicación. La tarifa de alojamiento aplicada a los residentes beneficiarios del ASH era, por su parte, definida directamente por los consejos departamentales.
Un decreto publicado en Diario Oficial de 1es En enero de 2025 se modificaron los términos y condiciones para fijar los precios de estas residencias de ancianos. La tasa aplicada a los residentes que se benefician del ASH sigue siendo definida por los consejos departamentales; y el decreto fija en el 35% la diferencia máxima, para servicios idénticos, entre la tarifa de alojamiento aplicada a los beneficiarios del ASH y la aplicada a los no beneficiarios de esta ayuda. Cuando se establezcan precios diferenciados, una residencia de ancianos debe informar al consejo departamental de su ubicación. El consejo departamental tiene la posibilidad de reducir la diferencia de precio establecida por la residencia de ancianos, con el fin de preservar una oferta de alojamiento asequible dentro de su territorio.
Las residencias de mayores podrán utilizar estos nuevos métodos de fijación de precios para las personas que lleguen a su establecimiento a partir del 1es Enero de 2025.
A saber
El precio del alojamiento en residencia de ancianos incluye:
- la provisión de una habitación;
- mantenimiento de espacios privados y comunes;
- servicios de restauración (acceso a un servicio de restauración, además de 3 comidas, merienda y provisión de merienda nocturna);
- Servicios de entretenimiento de la vida social (acceso a eventos y actividades colectivas organizadas dentro del establecimiento, etc.).