Información clave
- Se espera que el PIB de Alemania se estanque en la mitad del invierno y comience a recuperarse lentamente en 2025.
- El Bundesbank pronostica una caída del 0,2 por ciento en el PIB real este año y un ligero crecimiento del 0,2 por ciento el próximo año, seguido de un crecimiento más fuerte del 0,8 por ciento y 0,9 por ciento en 2026 y 2027, respectivamente.
- El consumo privado seguirá creciendo, pero con un menor dinamismo debido al enfriamiento del mercado laboral y la reducción del crecimiento salarial.
La economía alemana enfrenta desafíos persistentes que impactan la producción industrial, las exportaciones, las inversiones y el mercado laboral. Esta situación ha provocado una desaceleración del consumo privado, que ya no es un motor de recuperación económica. Como resultado, se espera que el PIB de Alemania se estanque durante el semestre de invierno, antes de experimentar una lenta recuperación a partir de 2025.
El Bundesbank pronostica una caída del 0,2 por ciento del PIB real este año y un ligero crecimiento del 0,2 por ciento el próximo año. Sin embargo, se espera un crecimiento más fuerte del 0,8 por ciento y 0,9 por ciento en 2026 y 2027 respectivamente. Las previsiones prevén una recuperación gradual de la actividad exportadora y un posible aumento de la inversión empresarial tras algún retraso.
Impacto en el consumo privado
Aunque el consumo privado continúa creciendo, es menos dinámico de lo esperado debido al enfriamiento del mercado laboral y al menor crecimiento de los salarios. Como resultado, el gasto de los consumidores experimentará inicialmente sólo aumentos marginales.
En general, las perspectivas económicas se han rebajado significativamente con respecto a las previsiones anteriores. A pesar de la débil actividad económica, se espera que la inflación medida por el índice armonizado de precios al consumidor (IPCA) disminuya ligeramente en 2025, del 2,5 por ciento al 2,4 por ciento. Esta evolución se atribuye a un aumento temporal de los precios de los alimentos y a presiones persistentes sobre los precios de los servicios.
Proyecciones de inflación
Sin embargo, a partir de 2026, se espera que la inflación en Alemania disminuya gradualmente hasta el 2 por ciento, impulsada por un endurecimiento previo de la política monetaria y el alivio de las presiones sobre los precios vinculadas a los costos laborales. Excluyendo la energía y los alimentos, se espera que la inflación subyacente aumente del 3,3 por ciento este año al 2,4 por ciento el próximo año, y luego al 1,9 por ciento en 2026. En 2027, se espera que la tasa de inflación básica aumente ligeramente con la recuperación económica, alcanzando el 2,0 por ciento. .
Se espera que el ratio de déficit público disminuya ligeramente, del 2,6 por ciento en 2023 al 2,4 por ciento en 2027, en parte gracias a la expiración de las medidas de ayuda vinculadas a la crisis energética. Sin embargo, se espera que el aumento del gasto en Seguridad Social, pagos de intereses y defensa compense parte de esta reducción. Por lo tanto, el ratio de deuda caerá al 61,7 por ciento en 2027, desde el 62,9 por ciento en 2023.
Incertidumbres y riesgos
A pesar de estas proyecciones, persisten varias incertidumbres. Un posible aumento del proteccionismo global, los conflictos geopolíticos en curso, el impacto de los cambios estructurales y la dirección de las futuras políticas fiscales y económicas después de las elecciones del Bundestag presentan riesgos significativos. Estos factores podrían conducir a un crecimiento económico aún más débil y a una inflación más alta de lo esperado.
Si quieres acceder a todos los artículos, ¡suscríbete aquí!