El mundo ferroviario francés está cambiando ante la llegada de la competencia. El 14 de diciembre se alcanzará un nuevo paso crucial en la transformación del ferrocarril francés: alrededor de 1.200 trabajadores ferroviarios de SNCF serán transferidos a filiales del grupo público, a excepción de Bretaña y Occitania.
Los imprescindibles del día: nuestra selección exclusiva
Cada día, nuestro equipo editorial reserva para usted las mejores noticias regionales. Una selección solo para ti, para estar en contacto con tus regiones.
France Télévisions utiliza su dirección de correo electrónico para enviarle el boletín “Los imprescindibles del día: nuestra selección exclusiva”. Puede darse de baja en cualquier momento a través del enlace al final de este boletín. Nuestra política de privacidad
En Nantes, Amiens y Niza, los trabajadores ferroviarios de los trenes expresos regionales (TER) dejarán SNCF Voyageurs para incorporarse a “empresas dedicadas”, lo que marcará el fin del monopolio de SNCF en estas líneas regionales. Estos tres “lotes” se ganaron durante licitaciones organizadas por las regiones que optaron por abrir a la competencia sus redes TER.
Sólo dos regiones (Bretaña y Occitania) han retrasado este plazo tan tarde como les permitía la ley, hasta 2030. Para entonces, casi todos los trabajadores ferroviarios de TER serán transferidos a filiales de SNCF o a competidores que hayan conquistado los mercados, como Transdev. para Niza-Marsella a partir de 2025.
Actualmente, “Cerca del 60% del mercado TER” está en proceso de licitación, indica un ejecutivo de SNCF Voyageurs. Hasta el momento se han adjudicado cinco lotes (tres a SNCF Voyageurs y dos a Transdev).
“Yo lo llamo privatización de baja intensidad”afirma Fabien Villedieu, secretario federal de Sud-Rail, cuyo sindicato convoca una huelga el jueves junto con la CGT-Cheminots, la Unsa-Ferroviaire y la CFDT-Cheminots.
Lea también: Presupuesto 2025. “Ya basta con no hacer funcionar el TER durante cuatro meses”, los ahorros solicitados a las comunidades no pasan
A finales de 2021, Trenitalia fue la primera empresa en aprovechar la apertura del mercado francés de alta velocidad. Desde entonces se le ha sumado la española Renfe. Pero para los trenes regionales el proceso fue más largo. Y esta “subvención” denunciada por los sindicatos irá acompañada de pérdida de derechos, insisten.
A partir del traspaso de los trabajadores ferroviarios, la filial dispone de 15 meses para renegociar todos los acuerdos de empresa de SNCF. “Lo más importante es la organización del tiempo de trabajo”explica Fabien Villedieu. Es decir, el número de días de descanso al año, la duración de una jornada laboral o incluso el número de noches pasadas fuera de casa.
Las negociaciones se llevarán a cabo sobre la base del acuerdo de rama, menos ventajoso que el de la SNCF, para poder ser competitivos, afirma el grupo ferroviario.
El secretario general de la CGT-Cheminots, Thierry Nier, denuncia “dumping social y deterioro de las condiciones laborales” lo que resultará en un deterioro en la calidad del servicio.
No obstante, se garantizan algunas ventajas, como derechos de jubilación para los trabajadores ferroviarios con estatus, empleo garantizado o incluso facilidades de viaje (billetes de tren reducidos).
Lea también: París – Rennes en tren: a partir del 5 de abril Ouigos más lentos para atraer clientes que quieran pagar menos
Gilles Savary, miembro del alto comité ferroviario, cree que la competencia obligará a la SNCF a aumentar la productividad y, por tanto, provocará una bajada de los precios.
“Todos los modos de transporte que se han abierto a la competencia han experimentado un boom”dijo, citando el ejemplo del transporte aéreo con la aparición de las aerolíneas de bajo coste.
En la región de Niza, la oferta de trenes aumentará un 75% a partir de mediados de diciembre, asegura SNCF Voyageurs. La llegada de Trenitalia a la ruta París-Lyon también permitió reducir los precios alrededor de un 10%, según la Autoridad Reguladora del Transporte (ART).
La competencia tiene “muchos beneficios”confirma el presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Usuarios de Transportes (Fnaut), François Delétraz. Pero también induce a algunos “efectos perversos”advierte. “No se debe hacer en las tres líneas rentables y la SNCF debe cerrar todas las líneas no rentables en Francia”se preocupa.
A diferencia del transporte regional, que está en gran medida subvencionado, la alta velocidad no recibe dinero público. Históricamente, el poder político ha obligado a la SNCF a prestar servicios no rentables (Chambéry, Saint-Malo, Saint-Etienne, etc.) en nombre de la planificación regional.
Sin embargo, los competidores sólo se posicionan en líneas lucrativas, lo que hace temer que la SNCF abandone determinados servicios para seguir siendo competitiva.
El Gobierno se ha ocupado recientemente de esta cuestión, ya que el Ministro de Transportes, François Durovray, lanzó un proyecto sobre el futuro de los servicios de desarrollo regional del TGV para que la competencia “no beneficia sólo a determinados territorios”.