Debido a los ataques de los rebeldes hutíes en el Mar Rojo, los barcos están tomando rutas más largas y se están formando atascos en los puertos. Consecuencia: los comerciantes anticipan retrasos. Están tomando pedidos para la temporada navideña mucho antes de lo habitual.
Los rebeldes hutíes siguen amenazando con intensificar sus ataques contra los barcos que pasan por el Mar Rojo, después de los ataques estadounidenses y británicos contra sus posiciones. Numerosos incidentes en el sector ya han obligado a un gran grupo de armadores a evitar el sector evitando África para llegar a Asia y Europa.
Por tanto, su viaje se alarga, lo que conlleva costes adicionales y plazos de entrega de dos a tres semanas. Esta situación induce un efecto dominó y, al final del viaje, congestión en los puertos y luego sobrecargas en las líneas ferroviarias. “A menudo perdemos entre cinco y seis días”, lo que prolonga aún más el tiempo total, estimó el lunes en La Matinale Jérôme Volluz, director de transporte marítimo de Kuehne+Nagel Suiza.
Dos meses antes
Para evitar retrasos, los transportistas tomaron la delantera en sus pedidos de fin de año, con dos meses de antelación. Este año, los pedidos de Navidad comenzaron a mediados de abril, mientras que normalmente comienzan a mediados de junio, explica Jérôme Volluz, precisando que los compradores prevén un tiempo de tránsito adicional de unos 15 días y congestión.
“Nadie esperaba realmente todo esto”, admite Jérôme Volluz. Esta situación genera una escasez de contenedores cuyos precios se están disparando. Pasó de 1.000 a 4.000 dólares (de aproximadamente 900 a 3.600 francos) en sólo tres meses.
Asunto de radio: Virginie Langerock
Adaptación web: Julie Liardet
