El presidente de la asociación invitó a las autoridades a investigar las causas de la renuencia a casarse, a formar a los futuros novios y a establecer incentivos financieros y fiscales para los primeros años del primer matrimonio. Rabbah también pidió que se introduzcan medidas para reducir los casos de divorcio, regular mejor el divorcio amistoso para evitar abusos y garantizar los derechos de ambas partes después del divorcio, en particular la pensión alimenticia, la custodia de los hijos, así como su protección contra cualquier forma de violencia o explotación en caso de nuevo matrimonio de uno de los padres.
El ex líder del Partido Justicia y Desarrollo (PJD) también insistió en la necesidad de que el Gobierno y el Consejo Superior de los Ulemas informen a la opinión pública sobre los entresijos de la reforma del Código de Familia para disipar malentendidos. Rabbah no dejó de instar a las autoridades a tener en cuenta propuestas y contribuciones constructivas con miras a un Código de Familia más igualitario y respetuoso de los derechos de las mujeres y los niños.
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En esta dinámica, su asociación organizó una jornada online dedicada al Código de Familia. Objetivo, discutir las preocupaciones planteadas en las conclusiones de la comisión responsable de la reforma de Moudawana. Especialistas marroquíes y extranjeros, en particular de Francia, Polonia, España, Estados Unidos, Canadá, Bélgica, Qatar, Alemania, Países Bajos, Italia y el Reino Unido, participaron activamente en estos encuentros en los que se hizo un llamamiento a promover matrimonio, consolidar los valores familiares y combatir la desintegración familiar.
Al final de los debates, la asociación recomendó la protección de los menores contra la marginación, la explotación y la desviación, el cuidado por parte del Estado de los huérfanos y de los niños de familias pobres, así como su apoyo a los planes educativos y religiosos. Propuso también la creación de centros y programas de apoyo psicológico para los hijos de divorciados, viudas y niños nacidos fuera del matrimonio, invitando además a la opinión pública a no sacar conclusiones precipitadas antes de la adopción de la nueva ley Moudawana.
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