Nueva polémica sobre los gastos de la metrópoli de Lyon. Un funcionario electo critica los contratos públicos considerados “superfluos” en tiempos de crisis presupuestaria. El presidente se explica pero el debate se lanza sobre la gestión de los fondos públicos.
Mientras la metrópoli de Lyon atraviesa un período de fuertes limitaciones presupuestarias, la validación de algunos contratos públicos por valor de varios millones de euros este verano ha suscitado críticas por parte de los cargos electos locales. En el centro de la polémica están los gastos considerados “superfluos” por algunos en estos tiempos de crisis.
Los contratos públicos cuestionados
Según nuestra información, Nathalie Perrin-Gilbert, elegida Métropole en Commune, interrogó a Bruno Bernard, presidente de la metrópoli, sobre la validación entre julio y septiembre de contratos públicos por un importe total de al menos 7,5 millones de euros. Entre los gastos destacan:
- 400.000 euros para “estudios, encuestas y posicionamiento marketing”
- 400.000 euros para la maquetación del diario metropolitano
- 420.000 euros para “el desarrollo de un plan de acción de marketing”
- 3,5 millones de euros por “servicios de comunicación gráfica”
El electo también se mostró sorprendido por un contrato por valor de 130.000 euros firmado con una empresa de la región parisina para “la realización de una revista de prensa diaria para la presidencia”, así como 2,4 millones de euros destinados a “eventos asociados al residuo cero”. .
¿Es esto realmente una prioridad en tiempos de crisis presupuestaria?
preguntó Nathalie Perrin-Gilbert.
Se señala la falta de transparencia
Más allá de las cuantías, lo que se denuncia es la falta de “transparencia de la comunidad”. El electo lamenta una discrepancia entre los esfuerzos exigidos a los lioneses y a los agentes de la metrópoli y estos gastos que pueden parecer “superfluos”.
Subraya que estos mercados no aparecen claramente en el orden del día del consejo, sino que simplemente están disponibles en los anexos, sin detalles precisos. “En un momento de populismo y desconfianza, tenemos la responsabilidad de hacer comprensibles las decisiones políticas”, insiste.
¿Servicios que podrían internalizarse?
Nathalie Perrin-Gilbert también cree que muchos de estos servicios podrían ser prestados internamente por los aproximadamente 9.600 agentes de la metrópoli, en lugar de recurrir a costosos proveedores de servicios externos.
Contactado, el entorno de Bruno Bernard asume estos gastos, considerándolos “necesarios para el buen funcionamiento y la influencia” de la comunidad. “Estaremos encantados de responder a las preguntas presupuestarias”, comentó simplemente el presidente de la metrópoli, prometiendo más “explicaciones” sobre estas opciones.
Un debate que no ha hecho más que empezar
Pero la controversia no debería terminar ahí. En un contexto económico tenso para las autoridades locales, cada gasto es examinado y sujeto a debate. La metrópoli de Lyon, como otras, tendrá que aclarar sus prioridades presupuestarias y demostrar educación a los ciudadanos.
Porque más allá de las cifras, lo que se recauda es la cuestión del uso del dinero público. Entre inversiones de futuro, gastos operativos y “extras” de comunicación, a veces es difícil encontrar el equilibrio. Y el debate promete ser animado en los próximos meses, en el momento de las decisiones presupuestarias.
Una cosa es segura: en un contexto de desconfianza hacia los funcionarios electos, la transparencia y la ejemplaridad serán más importantes que nunca. La metrópoli de Lyon, como otras comunidades, tendrá que rendir cuentas de cada euro gastado. Un gran desafío en tiempos de escasez presupuestaria.