El Tribunal Administrativo Federal (TAF) acaba de aclarar la concesión del estatuto de refugiado en Suiza a los nacionales turcos. Mientras estallan las solicitudes en Suiza y Europa, alimentadas por la represión del régimen de Recep Tayyip Erdogan, el Tribunal fue claro: consideró que la apertura de procedimientos en Turquía por “desacato al presidente” o “propaganda a una organización terrorista” no constituye , en sí mismo, un motivo suficiente para conceder asilo.
Estos cargos, a menudo vinculados a publicaciones en las redes sociales, no implican un temor fundado de persecución en el país, afirma el Tribunal. Esta decisión corre el riesgo de convertirse en un hito, ya que las solicitudes de asilo de los turcos alcanzan récords. En 2022, Suiza registró 4.791 solicitudes, recordó recientemente la RTS, una cifra nunca antes vista. El aumento se atribuye al deterioro de las condiciones económicas y a la intensificación de la represión desde el intento de golpe de 2016.
Turquía está aumentando los arrestos masivos de opositores y reprimiendo duramente las voces disidentes, en particular a través de una ley reciente dirigida a los críticos en línea. Según la Secretaría de Estado de Migraciones (SEM), los activistas políticos y los usuarios de redes sociales críticos con el régimen son particularmente vulnerables. A pesar de todo, la TAF rechazó el recurso de un solicitante de asilo de Şırnak, confirmando que su regreso está previsto. De este modo se podría influir en la suerte de otras solicitudes de asilo.
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