El toque de queda entrará en vigor el 1 de enero de 2025, de 1 a 6 horas. Una medida que cambia la situación de los restauradores y directivos de establecimientos nocturnos. Los preparativos para la Nochevieja llevan más de un mes en marcha y algunos ya informan de numerosas cancelaciones de reservas para la noche del 31 de diciembre.
Sin locuras, hasta el final de la noche. 2025 comenzará con un sabor amargo para algunos restauradores.
Se acortarán las festividades de Nochevieja 2024/2025. El toque de queda anunciado por la alta comisión el 27 de diciembre estará vigente de 1 a 6 horas los días 1 y 2 de enero, pero sólo en Numea, Dumbéa, Païta y Mont-Dore. Una decisión lamentada por los restauradores de Numea, que tuvieron que reorganizarse tres días antes de la gran velada. “Hemos adelantado el inicio de la tarde para que haya un horario de noche equivalente, vamos a hacerlo de 7 p.m. a 00:30 a.m. en lugar de 2 a.m.”. explica Nicolas Ruffat, director de un restaurante en Numea.
Antoine Pissoat ha previsto 55 comidas y un menú festivo en su establecimiento de Numea. Una Nochevieja preparada desde hace más de un mes, con pedidos realizados con mucha antelación a los proveedores. Ya ha registrado un 50% de cancelaciones de sus reservas para la noche del 31 de diciembre.
Lo que la mayoría de la gente nos dijo fue que se iban al monte, no había toque de queda después de Païta. La gente va al mar o a los islotes para celebrar el Año Nuevo.
Antoine Pissoat, director de un restaurante en Numea
Lo mismo ocurre con los responsables de los establecimientos nocturnos. El anuncio del toque de queda no les agrada sabiendo que la Nochevieja representa para ellos una de las noches más importantes del año.
En cuanto a los asistentes a la fiesta, algunos entienden, otros lamentan la aplicación de este toque de queda.
Vea estos testimonios recogidos en Païta por Alix Madec y Laura Schintu.
©nuevacaledonia
France
Books