En su primer discurso como secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), el ex primer ministro holandés Mark Rutte destacó la necesidad de que los estados miembros de la alianza militar gasten más en defensa.
Este martes, Mark Rutte asumió como jefe de la alianza militar más grande y poderosa del mundo: la OTAN, que encontró nueva vida cuando Rusia atacó a Ucrania hace más de dos años. El holandés tendrá ahora la inmensa responsabilidad de garantizar que los aliados estén preparados para la guerra en todo momento.
Al describir sus prioridades para su mandato, mencionó el apoyo a Ucrania y la colaboración con la Unión Europea, que actualmente está fortaleciendo su papel de defensa apoyando la adquisición y producción conjuntas de defensa.
También prometió aumentar la cooperación con los países del Pacífico, es decir, monitorear a China, trabajar con Japón, Corea del Sur, Australia y Nueva Zelanda, así como con los países del Sur que enfrentan el terrorismo y la influencia de Beijing y Moscú.
Gastar más
A pesar de su reputación de partidario del rigor presupuestario, Mark Rutte insistió repetidamente, durante su discurso ante los embajadores de los 32 aliados en la OTAN, en que los miembros de la alianza deben aumentar sus gastos de defensa, independientemente del resultado de las elecciones estadounidenses de noviembre.
“Para que la OTAN siga siendo fuerte y nuestra defensa siga siendo eficaz y creíble frente a todas las amenazas, necesitamos más fuerzas, mejores capacidades e innovación más rápida; esto requiere más inversión”dijo.
“Para realmente adaptar las capacidades a las necesidades, es necesario un aumento significativo del gasto en defensa; nos aseguraremos de invertir lo suficiente en las áreas correctas”añadió durante una entrevista con la prensa.
El gasto en defensa ha disminuido desde el final de la Guerra Fría, durante la cual los países de la OTAN gastaron alrededor del 3,5% de su PIB en gasto en defensa. Actualmente, 23 países miembros dedican más del 2% de su PIB a este ámbito. En comparación, hace diez años sólo tres habían alcanzado este hito.
Los países del Este están presionando para que se lleve a cabo un debate para aumentar el objetivo de gasto mínimo en defensa del 2% al 3% del PIB nacional de los distintos aliados.
Pero no todos están de acuerdo en destinar más a defensa. El entonces primer ministro de los Países Bajos, Mark Rutte, se abstuvo de aumentar el gasto en defensa hasta que Rusia atacó Ucrania en el invierno de 2022.
En su discurso del martes, el nuevo secretario general de la Alianza no precisó si apoyaba un aumento del objetivo de gasto en defensa o si lo consideraba necesario.
Nuevas prioridades presupuestarias
Mark Rutte tendrá que luchar contra países que creen que el objetivo fijo del 2% no es ideal, y algunos piden una nueva definición de los criterios o afirman que el tamaño de su economía no les permite gastar tanto dinero en sus ejércitos.
Después de pasar años pidiendo a sus colegas europeos que equilibraran sus cuentas y redujeran las deudas y los déficits, llamándose con orgullo frugal, el nuevo secretario general de la OTAN dijo que la situación ahora era diferente.
Presupuesto equilibrado “Es un problema al que se enfrentan muchos gobiernos, pero es lo que se supone que deben hacer los responsables de las políticas.”, y esto significa que debemos asegurarnos de que “las prioridades están financiadas”señaló, sugiriendo que se debería dar mayor importancia a la defensa.
“Tenemos que defendernos. Si alguien ataca, ganaremos. Pero debemos asegurarnos de que esto también sea así en los próximos años. »
Mark Rutte también tendrá que tener en cuenta los consejos de su predecesor, Jens Stoltenberg, que éste recogió en una carta publicada el último día de su mandato. El noruego advirtió a su sucesor sobre los riesgos provenientes de Beijing, particularmente en términos de infraestructuras críticas.
OTAN: una mirada retrospectiva al mandato de Jens Stoltenberg como Secretario General
El apoyo a Ucrania, la revisión de los mecanismos de defensa colectiva de la Alianza y el aumento de su gasto representan los momentos más destacados de los diez años de Jens Stoltenberg al frente de la OTAN, mientras pasa el testigo a Mark Rutte el 1 de octubre.
[Édité par Anne-Sophie Gayet]
