En una entrevista con el diario británico Big Issue, Emilia Clarke habla de los muchos problemas que tuvo que afrontar durante el rodaje de la serie Juego de Tronos, que la revelaron al público en general. Además de las escenas de desnudos, de las que ella dijo “sin saber qué hacer, qué se esperaba de mí, qué querían de mí, ni siquiera qué quería yo”, esta vez evoca los graves problemas de salud encontrados durante el rodaje.
Según los informes, la actriz sufrió dos hemorragias cerebrales mientras interpretaba el papel de Daenerys. Hoy habla de las dificultades para continuar con su trabajo y del temor de que sus problemas de salud le impidan desempeñar su función.
“Cuando sufres un traumatismo craneoencefálico, porque altera tu autoestima a un nivel tan dramático, todas las inseguridades que sientes al llegar al lugar de trabajo se cuadriplican de la noche a la mañana.explicó en particular. El primer temor que todos tuvimos fue: ‘Dios mío, ¿me van a despedir?’ ¿Me despedirán porque creen que no soy capaz de realizar el trabajo?“
Aunque sus dos aneurismas rotos se produjeron entre las distintas temporadas de rodaje, su miedo a morir frente a las cámaras persistió. Ella recuerda haber pensado: “Si voy a morir, será mejor que muera en la televisión en vivo.”.
Desde entonces, la que también protagonizó Solo: Una historia de Star Wars ha fundado una organización benéfica junto a su madre, SameYou, para ayudar a personas que han sufrido accidentes cerebrovasculares. Fueron condecorados con el título de Miembros de la Orden del Imperio Británico por el Príncipe William el pasado mes de febrero.
