Durante el juicio por violación en Mazan, el principal acusado, Dominique Pelicot, fue presentado por expertos psiquiátricos como un hombre que padecía varias perversiones sexuales (hoy preferimos hablar de “parafilia”). ¿Qué abarca este término “perversión”? ¿Cómo ha evolucionado la visión de los pervertidos sexuales desde la Edad Media? ¿Los coacusados de Dominique Pelicot también padecen perversiones sexuales o son “hombres corrientes”, como hemos oído a menudo desde el inicio del proceso?
Le hicimos estas preguntas a la historiadora Elisabeth Roudinesco, autora de un Historia del psicoanálisis en Francia en dos volúmenes (Fayard, 1994; reedición de Points, 2023), de un Diccionario de psicoanálisis con Michel Plon (Fayard, 2023) y La parte oscura de nosotros mismos. Una historia de pervertidos (Albin Michel, 2007). Miembro del comité científico de la revista. Historia de la psiquiatríapreside la Sociedad Internacional para la Historia de la Psiquiatría y el Psicoanálisis desde 2007. Es cofundadora del Instituto de Historia e Ilustración del Pensamiento y colaboradora de “World of Books”.
En el marco de la investigación sobre las violaciones de Mazan, dos psiquiatras expertos del tribunal, Laurent Layet y Paul Bensussan, examinaron al principal acusado, Dominique Pelicot. El primero concluye que presenta una “desviación parafílica”, el segundo que está afectado por “varias parafilias y fantasías extraordinarias”. ¿A qué se refiere esta palabra “parafilia”?
Es una palabra técnica, incluso jerga, que designa, en el sentido Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM), todas las perversiones sexuales. Nacida en 1952, publicada por la Asociación Estadounidense de Psiquiatría, esta clasificación internacional de los trastornos del comportamiento humano se ha convertido en la herramienta dominante de la psiquiatría biológica contemporánea: los psiquiatras de todo el mundo informan de su trabajo a través de sus nomenclaturas.
La palabra “parafilia”, que aparece en el DSM en 1980, designa, en su última versión (2013), “fantasías imaginativas (fantasías) que excitan sexualmente, impulsos o comportamientos sexuales que se producen de forma repetida e intensa y que involucran objetos inanimados, sufrimiento o autohumillación de la propia pareja, de los hijos o de otras personas. -personas que consientan, y que se extiendan durante un período de al menos seis meses” – exhibicionismo, fetichismo, frotteurismo, pedofilia, masoquismo sexual, sadismo sexual, voyeurismo, travestismo o fetichismo…
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