El Principito de Antoine de Saint-Exupéry ha alcanzado las 600 traducciones, incluida la última en dulegaya. Esta obra contribuye a la preservación de lenguas en peligro de extinción y sigue siendo el libro más traducido después de los textos religiosos.
¡Nuevo disco de El Principito! La obra de Antoine de Saint-Exupéry alcanzó la marca de 600 traducciones en 2024. El último se hizo en dulegaya, una lengua kuna de un pueblo indígena de Centroamérica.
Para esta nueva edición, el toque local lo encontramos en la portada. Destaca el arte textil de Mola según un comunicado de prensa de la Fundación Antoine de Saint-Exupéry.
Un libro vendido en varios millones de copias.
Publicado por primera vez en 1943 en Nueva York, el famoso cuento ha vendido más de 300 millones de ejemplares a un ritmo de 5 millones al año. Está por delante de Pinocho y Alicia en el país de las maravillas en el podio del libro más traducido del mundo (excluidos los textos religiosos). Los libros infantiles copan los primeros puestos de este ranking.
Para llegar a esta cifra récord, la Fundación Antoine de Saint Exupéry llevó a cabo un intenso trabajo en múltiples proyectos de traducción. Por ello se enorgullece de consolidar “así su papel como libro que une a las personas”.
Una obra que sirve como operación para salvaguardar las lenguas
El libro recibió así el título de versión en toba en 2005. Se trata de un dialecto nativo americano hablado por al menos 20.000 personas en América del Sur. En su momento, según Le Monde, fue la primera obra profana traducida a esta lengua.
La obra también ocupa un lugar destacado en un programa de preservación de la lengua del CNRS. La herencia oral francesa está perdiendo dialectos con la desaparición de sus últimos hablantes. La traducción de El Principito al bretón, al corso o incluso al occitano permite conservar una huella duradera de determinados dialectos.